Desde hace una década es uno de los habituales en el muelle coruñés de La Marina. El “Rías Altas 2” ofrece a coruñeses y visitantes durante la época estival la oportunidad de conocer la historia local desde otra perspectiva, la marítima, aunque cada vez le resulta más difícil salir del puerto. “La verdad es que fue un mes de julio muy malo. Ya no es que no acompañase el tiempo sino que las personas tampoco y hubo días en los que no salió”, comenta el propietario de Cruceros Marítimos Fernández Cabana, Francisco Fernández.
Un gran cartel, en castellano y en inglés, anuncia en la explanada del Parrote junto a la embarcación el servicio para que todo aquel que se dé un paseo por la ciudad pueda conocer esta posibilidad turística. La publicidad no parece ser el problema a la hora de justificar la baja demanda, una práctica que, tal y como indica el responsable de la compañía, se acentúa de un tiempo a esta parte. “Nosotros lo seguimos anunciando tanto en internet como en la radio y la gente lo conoce pero empezamos el uno de julio y la cosa bajó mucho”, asegura.
Hacen falta un mínimo de 15 personas para que el barco, la antigua lancha a Santa Cristina, pueda zarpar por lo que hay días en los que resulta tarea difícil. El precio sigue siendo el mismo que otros años, siete euros por persona, y el recorrido es circular y de una hora de duración.
“Salimos desde la dársena de la Marina, vamos por San Antón, San Amaro, Mera, Santa Cruz y el puerto petrolero donde damos vuelta”, explica Fernández, al mismo tiempo que destaca que el valor añadido de este servicio es el servicio de megafonía por el que se va explicando la historia de A Coruña desde la perspectiva marítima; “es una forma diferente y original de conocer el entorno”.
El barco estará disponible durante todo el verano y ofrece seis salidas al día, dos por la mañana (12.00 y 13.00 horas) y cuatro por la tarde (16.00, 17.00, 18.00 y 19.00 horas). Los que estén interesados en probar este servicio solo tienen que estar junto al cartel informativo 10 minutos antes de la hora a la que está previsto que zarpe la embarcación.
Aunque no existe un público definido para este recurso, los que más suelen disfrutar de estos paseos fluviales son, como es habitual, los más pequeños.
Herencia
La antigua lancha a Santa Cristina estuvo en funcionamiento unos 60 años pero, desde hace algunos cuantos, ya no existe la posibilidad de que el actual barco que une A Coruña y Oleiros haga una parada en este último municipio, debido a que ya no existe embarcadero, tal y como recuerdo Francisco Fernández.
Las antiguas lanchas que cubrían el trayecto entre A Coruña y Santa Cristina entraron en funcionamiento en los años 20 de la mano, también, de la familia Fernández Cabanas y, en los años cincuenta y sesenta, las colas para embarcar en la dársena coruñesa eran frecuentes ya que eran mucho los que deseaban poner rumbo a un día de playa.
Eran varias las lanchas que hacían el trayecto, de uno o dos pisos –muy demandadas en días soleados–, siendo popularmente conocidas como “La Ferrolana” y la “La Chinita”.
Los víveres, neveras y complementos playeros copaban los asientos de la embarcación, repletos de familias dispuestas a pasar una jornada festiva en una época en la que el coche particular tampoco era tan habitual como lo es hoy en día.