La Xunta avanza en las obras de continuación de la Vía Ártabra para su conexión con la AP-9. Una actuación certificada en casi un 40% que permitirá, en opinión de la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, “acurtar nun terzo” la conexión de Oleiros, Sada y Cambre con la ciudad de A Coruña, lo que implica más calidad de vida para sus vecinos, e impulsar la competitividad de las áreas industriales de Iñás, Bergondo y Espíritu Santo.
Vázquez explicó, durante una visita a las obras, que esta ampliación “dará sentido” a los diez kilómetros ahora en uso, por los circulan unos 5.000 vehículos al día y avanzará con otros cuatro en el acceso a la AP-9.
En este sentido, la conselleira indicó que esperan la “autorización” del Ministerio de Transporte para la conexión con la AP-9 en incidió en que el Gobierno del Estado es el “único responsable” de marcar los peajes en esta carretera porque “a Vía Ártabra é libre de peaxes”, matizó la titular de Infraestruturas e Mobilidade..
Asimismo, en clara alusión a las reivindicaciones del Ayuntamiento de Cambre aunque sin nombrarlo, destacó que se modificó el trazado en este tramo para dar “aínda máis protección” tanto a los vecinos como al territorio “para protexer aínda máis os valores ambientais e o contorno do Gándara”, añadió la representante autonómica, que estuvo acompañada por el delegado de la Xunta en A Coruña, Gonzalo Trenor.
Pide la “implicación” del Gobierno por la competitividad del área coruñesa
La conselleira de Infraestructuras, Ethel Vázquez, pidió la “implicación seria” y el “compromiso” del Gobierno para mejorar la “competitividad” del área coruñesa, concretamente, al solicitar el enlace con la AP-9 y la licitación de la conexión ferroviaria a Punta Langosteira, pues para seguir mejorando “la competitividad” es necesario que licite “de modo inmediato” esta obra
Además, detalló que hace unos días acabó el trámite de información pública de esa modificación, “polo que xa se están a analizar as alegacións recibidas para logo incorporar as achegas necesarias”, apostilló Ethel Vázquez.
Infraestruturas invierte 40 millones en las obras, que estarán en uso en 2022. Este trazado se completa con el enlace para la posterior conexión del vía con la A-6. Pero la ciudad será el destino del 90% de los movimientos, según uno de los técnicos de la empresa que acomete estas obras, ahora en los márgenes de la N-VI.
“Trátase dunha infraestrutura complexa que ten un dos puntos máis importantes na conexión coa N-VI, precisando dun enlace con tres niveis con ramais de saída e entrada, onde xa avanzaron os traballos”, resumieron desde Infraestruturas e Mobilidade.
También se realizaron las correspondientes demoliciones o movimientos de tierra y se repusieron parcialmente los servicios afectados en Sada y Oleiros.