La conselleira de Política Territorial, Ángeles Vázquez, y el delegado del a Xunta, Gonzalo Trenor, se reunieron ayer con los representantes de los empresarios de la provincia en la sede de la Xunta para darles a conocer las acciones que piensan desarrollar este año en relación al suelo empresarial. Vázquez destacó la gran demanda de suelo en el polígono de Morás (Arteixo), que es, junto con el de Sionlla (Santiago), es donde se encuentra la mayoría de las parcelas que saca ahora a la venta la Xunta: “É unha zona donde o empresariado quere ubicarse”.
Esta misma semana, la empresa pública de gestión del suelo, Xestur, sacaba a concurso las parcelas para poder vender y se puedan seguir instando empresas en Galicia o ampliar su presencia. La política autonómica en este ámbito se lleva a cabo a través de Xestur, pero también del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS), y este año entre las dos entidades ofrecen 1,4 millones de metros cuadrados que ya están urbanizados o en proceso.
536.200 metros
cuadrados de suelo industrial ponen a la venta Xestur y el IGVS
en la provincia
Son 34 las parcelas situadas en Morás las que la Xunta pone en venta, a un precio medio de 114,2 euros por metro cuadrado, con una rebaja de un 30%. En A Coruña, el concurso incluye un total de 190 parcelas, que suman más de 536.200 metros cuadrados a un precio medio bonificado de 81,47 euros el metro cuadrado. La rebaja será de 50% en los parques industriales de Cedeira, Ortigueira e Carballo; mientras que en los Arteixo, Negreira, Arzúa y Sionlla, debido a su mayor demanda, la rebaja será del 30%.
Aportación autonómica
“Aportaráse oito millóns de euros para a bonificación correspondente”, declaró Vázquez, que pidió al Gobierno central que en sus propios polígonos de SEA (Suelo Empresarial del Atlántico) y Sepes (entidad que posee el 80% de SEA) implemente las mismas bonificaciones. “Non debe de haber agravio comparativo”, demandó la conselleira.
Además, la Xunta ofrece a las empresas que opten al derecho de superficie: eso significa que pagan un euro el metro cuadrado para alquilar el terreno del que tienen una opción a compra. Si antes el plazo era a seis años, se pasa a ocho.
Pese al coronavirus, 2020 “non foi un mal ano. O empresariado galego arrisca, e cree en Galicia”, aseguró la conselleira y recordó que de 2015 a 2020 se vendieron 2,2 millones de metros cuadrados. Eso sí, reconoció que el covid genera dificultades para la implantación de empresas, así que aquellos que quieran comprar una parcela les ampliarán el plazo para la escritura y el pago, “estudando caso a caso”.