Decían  en los mentideros musicales, entre otras muchas cosas y no todas surgidas del “ardor patriótico” de los eurofans, esa pasión que en declaraciones previas de Alfred estaba congelada en la nevera del independentismo catalán, que el tema elegido para representar a España en la 63 edición de Eurovisión, “Tu canción”, bajaba “la tensión” por aquello de la rima fácil y de la interpretación almibarada  y de ribetes ñoños  que de ella hacían Amaia y Alfred en su amorosa declaración, extraída de la película musical “La la land”. 
Tan pronto se conoció la canción que competiría en Lisboa, un “entendido” del proceloso mundo eurovisivo, el recordado José María Íñigo, la eliminó de todas posibilidades de triunfo, diciendo que, a su entender,  no “daba la talla”. Y visto lo visto, acertó con su predicción. Amaia y Alfred la defendieron con “mucho cariño”, y una empatía emocional arropada por el ondear de banderas españolas que portaban miles de eurofans desplazados a Lisboa, pero que no llegó a tocar la fibra sentimental de los jurados profesionales ni de los “tele votantes”, y tampoco figuraba favorita en las apuestas, que al final, y desde el principio, señalaron a Israel y Chipre como favoritas. “Tu canción” quedó relegado a los últimos lugares, en el puesto veintitrés –un “puesto de mierda” según los representantes españoles– y ni tan siquiera, por aquello de la vecindad tan arraigada en Eurovisión, Portugal, que quedó de último, con “gallo” incluido de su representante —que los presentadores explicaron educadamente que había salido del gallinero vocal a causa “de la voz quebrada por la emoción”–tuvo a bien conceder ni un voto.  Este año ganó la originalidad, puesto que original fue la interpretación y la puesta en escena de la ganadora Netta Barzilai quién también “cacareó” en “Toy”  pero lo hizo a “sabiendas” , para “cantar la gallina” a todo aquel que en algún momento de su vida se metió con ella. 
Su ya famoso “baile del pollo” caló tan hondo que fue usado por muchos países a la hora de emitir el voto. Su rival más directo, que acarició el triunfo y se quedó en la puerta,  en segundo lugar, Eleni Foureira, representando a Chipre se vino arriba en el escenario con “Fuego”, con una producción muy efectista que se ganó la gran ovación de la noche. 
Esta edición del Festival se recordará por su calidad en la diversidad de ofertas musicales. Y hablando de recuerdos... ¿Se acuerdan del título de la canción y del intérprete que representó a España el pasado año? Cuesta un poco.... Pues eso....