Todavía hay millones de ciudadanos frotándose incrédulos los ojos ante la llegada masiva de vacunas a España. Parece que la época de las vacas flacas es ya cosa del pasado y cada semana se recibirán un millón y pico de dosis. Es más, por si esto no fuera suficiente, a partir del próximo día 15 comenzarán a fluir también los fármacos de Janssen, con lo que ya podemos hablar de casi festa rachada. Por eso, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, sigue insistiendo en que antes de que acabe el verano estaremos en eso que llaman inmunidad de rebaño, lo que no quiere decir que nos consideren borregos. El problema es que Darias dedica demasiado tiempo a hacer esas cuentas de la lechera que pueden fallar y demasiados disgustos nos hemos llevado ya a cuenta de las vacunas como para pensar que ahora se va a solucionar todo de golpe. Mejor sería seguir centrados en luchar contra la pandemia que anunciando victorias frente al virus.