Hoy entraron en vigor los cambios en las restricciones que afectan a los municipios de Cambre y de Carral. El primero pasa al nivel alto, mientras que el segundo desciende el medio.
En el caso de la localidad cambresa, desde hoy, y hasta que el comité clínico que asesora a la Xunta decida levantar las medidas, los locales de hostelería solo podrán utilizar el 50% de los exteriores, quedando cerrado el interior.
Ese es el mayor cambio, ya que tanto el toque de queda (a las 23.00 horas), como las reuniones (de cuatro personas en interiores y de seis en exteriores) seguirán siendo igual que hasta ahora. Además, tampoco se limitará la movilidad, algo que solo ocurre en aquellos ayuntamientos que se encuentran en el nivel máximo de restricciones.
Mientras tanto, en Carral, se aligeran las medidas y viven el camino inverso a Cambre. Así, hasta ahora su hostelería estaba limitada a la mitad del aforo exterior, pero hoy ya pudieron abrir también el 30% de los interiores.
No obstante, en ambos municipios se podrán seguir sirviendo cenas en los restaurantes hasta las 23.00 horas, como en el resto de Galicia, con la excepción de que en Cambre solo podrá ser en las terrazas.