Francisco Nicolás Gómez Iglesias, conocido como el Pequeño Nicolás, defenderá que no cometió delito cuando hizo un viaje a Ribadeo (Lugo) en el que presuntamente se hizo pasar por enlace entre el Gobierno y la Casa Real y acudió escoltado por policías, por lo que la Fiscalía pide para él siete años de cárcel.
La Sección 17 de la Audiencia Provincial de Madrid celebrará la próxima semana, los días 11, 12 y 13, el juicio al Pequeño Nicolás por los presuntos delitos de usurpación de funciones públicas, falsedad en documento oficial y cohecho pasivo.
Junto a él se sentarán en el banquillo de los acusados el cabo de la Policía Municipal de Madrid Jorge G. H., y el policía municipal de Torrijos (Toledo) Carlos P. L. D., para cada uno de los cuales el Ministerio Público pide cinco años y medio de prisión.
El letrado de el Pequeño Nicolás, Manuel Marchena Perea, hijo del magistrado el Tribunal Supremo, defenderá que el procesado no cometió delito, según ha adelantado a Efe.
Será la cuarta vez que se intente celebrar este juicio por el viaje a Ribadeo, tras una suspensión en 2019 por un cambio de letrada de el Pequeño Nicolás porque recibió presiones, la segunda por la pandemia de coronavirus en 2020 y la tercera el pasado mes de enero por contacto directo de covid de uno de los letrados.
La Fiscalía pide para Gómez Iglesias siete años de prisión y una multa de 81.000 euros, mientras que la acusación popular que ejercen la Asociación de Policía Municipal Unificada de Madrid (APMU) y Podemos pide 11 años de prisión para Gómez Iglesias; la Abogacía del Estado, 21 meses de cárcel y una multa, y el Ayuntamiento de Madrid reclama tres años y medio de prisión.
El Ministerio Público detalla que a principios del mes de agosto de 2014 el Pequeño Nicolás propuso organizar una reunión a un empresario asturiano -Jorge Cosmen- al que le hizo creer que era un funcionario público, enlace entre la Vicepresidencia del Gobierno y la Casa Real.
Y finalmente el 13 de agosto ambos almorzaron juntos en un restaurante de Ribadeo al que, según el acusado, “asistiría una persona muy importante de la Casa Real”, algo que nunca ocurrió.
Para llevar a cabo su plan Gómez Iglesias había contactado previamente con dos policías municipales, uno de ellos del Grupo de Escoltas, a los que pidió que le proporcionaran los medios policiales necesarios para hacerse pasar por un cargo público, a cambio de una gratificación por sus servicios.
Además solicitó a la Policía Municipal de Ribadeo que les acompañara en la comitiva, telefoneó al Presidente del Club Náutico para informarle de la visita de una alta personalidad de Casa Real, contrató el alquiler de cuatro vehículos con sus respectivos conductores, reservó tres mesas en el restaurante y hasta confeccionó en un ordenador personal acreditaciones del Ministerio del Interior para los vehículos, detalla la Fiscalía.
La Fiscalía sostiene que el principal acusado abonó al policía Jorge G.H. 2.000 euros, y este entregó 400 a Carlos P.L.D.
Francisco Nicolás Gómez Iglesias también se sentará en el banquillo nuevamente a finales de mayo -los días 20, 21 y 25- por la presunta trama por la que un amigo le hizo la selectividad en 2012.
La Fiscalía le imputa de cara a este juicio un delito de falsedad en documento oficial como cooperador necesario e inductor y solicita cuatro años y seis meses de cárcel más multa de 36.000 euros.
Francisco Nicolás Gómez Iglesias fue detenido en octubre de 2014, cuando tenía 20 años, acusado de falsedad, estafa y usurpación de identidad por hacerse pasar por miembro del Gobierno, tras lo que se le abrieron varios procesos judiciales, algunos ya finalizados, como la causa en la que estaba imputado por injurias y calumnias al Centro Nacional de Inteligencia, en la que fue absuelto.