Conectar A Coruña, Cambre, Culleredo, Oleiros y Arteixo con una espina vertebral sostenible que sirva como alternativa al vehículo privado y complemento del transporte alternativo. Ese es el objetivo primordial del proyecto que presentará la Diputación en unas semanas a los ayuntamientos por los que discurrirá la futura senda ciclable metropolitana.

Este paseo era una de las propuestas \“fuertes\” del programa presentado por el PP de A Coruña en las elecciones municipales del año pasado, pero finalmente ha sido la Diputación la que ha recogido el testigo para su ejecución. Según el planteamiento inicial, la senda permitiría más de 45 kilómetros de recorrido en bici (que finalmente se quedarán en unos 42), uniendo distintas vías que existen en la actualidad en los distintos ayuntamientos de la comarca.

A Coruña, Oleiros, Culleredo, Cambre y Arteixo deberán dar su visto bueno al proyecto a finales de este mes

El proyecto completaba tramos del propio casco urbano y se pararía de los 12,5 kilómetros de vías ciclables existentes en A Coruña a casi veinte. Uno de los principales objetivos es dar continuidad al carril bici portuario ampliándolo desde Palexco hasta el polideportivo de San Diego, con una ejecución de unos 3,4 kilómetros. El otro se extendería desde la playa de Oza hasta el puente de A Pasaxe con un total de 2,38 kilómetros y de esta forma se conectaría con el futuro carril bici que también se ha proyectado para Santa Cristina. En la actualidad, la playa no cuenta con vía ciclable, pues la ya existente comienza a la altura de Bastiagueiro.

La conexión con Cambre es otro de los objetivos del paseo ciclista metropolitano. El municipio cuenta en la actualidad con diez kilómetros de vías ciclistas, pero ninguna de ellas está próxima a los accesos a A Coruña. Lo que se pretendería, en este caso, es conectar el carril bici del paseo de O Burgo a través de O Temple y A Barcala.

El proyecto más factible –con unos 10 kilómetros– es dar continuidad a la pista bici que discurre a los pies del monte de San Pedro y que se está terminando en la senda litoral próxima a la EDAR de Bens. La ruta seguiría hasta punta Langosteira para entroncar finalmente con los carriles que ya tiene habilitados el ayuntamiento de Arteixo.

uniformidad en el sistema

A la espera de que se confirmen en unas semanas todos los detalles y que los ayuntamientos implicados den su visto bueno, el proyecto de senda ciclable ofrece dos retos principales, como son la conclusión de los tramos de carril bici en los cascos urbanos de cada municipio y su agrupación bajo un mismo aspecto para dar la sensación de continuidad. Según había avanzado el propio presidente de la Diputación, el departamento de Vías y Obras del ente provincial ha sido el encargado de gestionar el estudio.

Lo que todavía no se sabe es si el proyecto incluirá también la creación de un sistema único de préstamo para que se puedan recoger las bicicletas en alquiler en los distintos municipios. n