Si hay alguien a la que no gustan las medias tintas es a la ministra de Defensa, Margarita Robles. Muchos piensan de ella que es el verso libre que siempre hay en todo Gobierno y es posible que así sea. Pero es un verso libre muy peliagudo. Lo mejor es no cabrearla. El ultimo objetivo de su ira ha sido Marruecos, al que acusa de utilizar menores para intentar lograr sus objetivos y sin importarle lo más mínimo la seguridad de esos niños. Tiene razón. Eso fue lo que hizo el Gobierno alauí. Sin embargo, tampoco le puede quedar la más mínima duda de que los marroquís lo volverán a hacer cuando les apetezca.