El expresidente de Francia Nicolás Sarkozy ha advertido este miércoles de que el separatismo no es solo un "problema" que afecta a España y ha pedido a la Unión Europea combatirlo si no quiere pagar el "precio" de la "desunión y la desagregación" en más países europeos.
Así se ha pronunciado en su intervención en la Convención Nacional del PP que celebra en Madrid su tercera jornada, en la que ha expresado su apoyo al líder del PP, Pablo Casado. De hecho, ha revelado que la primera vez que lo vio en el Elíseo hace once años le dijo que algún día sería presidente del Gobierno.
Sarkozy ha afirmado que "el separatismo no es simplemente un problema de España" porque si se produjera su desunión, "sería toda Europa la que podría pagar este precio". Así, ha avisado que esa "desunión" y "desagregación" llevaría a "ejemplos pequeños" en Francia, Bélgica y otros países.
"Para mí esto queda claro. Solamente hay una España, una España unida, una España que tiene una capital que es Madrid y una Corona con un Rey que representa la unidad de España. Y esto no puede cambiar nunca", ha proclamado, cosechando un fuerte aplauso del auditorio.
SU ACTUACIÓN CONTRA ETA
Tras asegurar que "siempre" ha querido a España, Sarkozy ha recordado que cuando llegó al Ministerio del Interior en Francia le decían que ETA es "un problema de España" y que no había que "ocuparse demasiado de esto".
Sin embargo, ha indicado que él tenía claro que Francia tenía que estar "al lado de la democracia española y punto" porque ETA "ha sido la organización terrorista que ha matado a más personas en Europa".
"Después he conocido a varios presidentes del Gobierno de España, del PP y socialistas. Yo nunca he cambiado mi política, ha aseverado para asegurar que cuando Francia fue "firme" contra ETA, los españoles "pudieron hacer lo necesario para zanjar definitivamente el problema".
"EUROPA HOY ES DÉBIL, NO CUENTA"
Sarkozy, que dijo que estuvo al frente del eje atlántico cuando gobernó, ha señalado que los americanos "solo respetan a los fuertes". "Yo soy amigo de Estados Unidos, pero un amigo de pie, no un amigo acostado", ha manifestado.
En este punto, ha afirmado que Europa debe ser "fuerte" porque si no lo es será solo "un empleado". "Y nosotros no queremos ser el vasallo de nadie, ni de la Casa Blanca", ha enfatizado, para recalcar que hoy Europa "es débil" y "no cuenta".
Sarkozy ha afirmado que desde el mandato de Barack Obama, Estados Undos "ha renunciado a su papel de primera potencia mundial" y ha criticado la retirada de Afganistán. "No me gustó lo que ocurrió en Afganistán porque yo mandé a soldados franceses", ha afirmado.
En este punto, ha avisado que si Europa no refunda su funcionamiento va a "desaparecer del mapa", con sus valores. Además, ha señalado que aún no han visto "nada" de la crisis migratoria porque lo que verán más adelante será "mucho peor".
"EL BREXIT ES UN ESCÁNDALO"
El exmandatario francés ha afirmado que el Brexit "es un escándalo" y ha señalado que el primer ministro británico, Boris Johnson, tiene una "responsabilidad histórica" en el "divorcio" que se ha producido porque solo hay "30 kilómetros entre Gran Bretaña y Francia".
"Y ahora me van a explicar que están más cerca Australia, que está a 20.000 kilómetros que de los franceses, que están a 30 kilómetros", ha dicho Sarkozy, en alusión al AUKUS entre EEUU, Australia y Reino Unido.