El Juvenil A del Deportivo necesitará un ‘milanazo’ en Riazor dentro de tres semanas para avanzar en la Youth League. En su estreno, sufrió una severa derrota (3-0) ante el Pogoń Szczecin en un partido condicionado por los dos goles recibidos en los tiempos añadidos de la primera y de la segunda parte. El 3-0 llegó cuando el Depor estaba en inferioridad numérica por la expulsión de Peke en el 86.

El equipo de Manuel Pablo afrontaba en una fría y lluviosa tarde en Polonia su debut en el UEFA Youth League como campeón español de juveniles y lo hizo con un castigo excesivo a los méritos contraídos durante el partido.

Aunque a los jugadores dirigidos por Manuel Pablo les costó entrar en el encuentro y mantener la intensidad los casi 100 minutos jugados, el Dépor sí dispuso de ocasiones para haber marcado y conservar un marcador más corto para la vuelta.

El entrenador canario del conjunto blanquiazul alineó a todos los futbolistas de la convocatoria que están en dinámica de Fabril. Así en la portería no hubo sorpresas y fue Brais Suárez el titular. En el centro de la zaga también jugaron dos piezas que están habitualmente a las órdenes de Óscar Gilsanz: los centrales zurdos Juan Rodríguez y Dani Barcia. En los laterales estuvieron Quique Teijo (derecha) y Manu Rivas (izquierda). El doble pivote estuvo formado por otro jugador de edad sénior (Mario) y Rubén López, quedándose Urdiales en el banquillo. Quizá la línea más talentosa de la apuesta en Polonia fue la de mediapuntas, con Peke y Mella por fuera y Nájera de enganche. Trigo fue el delantero.

El lateral izquierdo Manu Rivas de centro chut, el extremo izquierdo Mella, probando desde fuera del áera, o Peke y Pablo Trigo en una doble acción consecutiva que obligó a intervenir a Legowski tuvieron oportunidades para anotar para el equipo español.

Las más claras fueron para Mella, que la estrelló en el palo izquierdo y Mario Domínguez que forzó una parada espectacular del guardameta local, pero no era la tarde del equipo blanquiazul, que no fue capaz de superar la portería contraria en ninguna ocasión.

Durante todo el partido hubo mucha contundencia física, varios jugadores que tuvieron que salir del campo lesionados, otros cargados por el esfuerzo, e intercambio de ocasiones.

El equipo local no perdonó cuando más débil se encontraba el Depor, al final de cada una de las partes, para anotar los goles que pueden sentenciar definitivamente la eliminatoria. A punto estuvieron de hacer el cuarto, que habría sido definitivo, justo antes del final pero Brais salvó la ocasión.

Con un hombre menos (Peke fue expulsado con doble tarjeta amarilla en el minuto 86) y 2-0 en el marcador, el Deportivo necesitaba no cometer errores defensivos que pudiesen provocar un gol más, pero fue justamente lo que pasó. Un fallo en la salida de balón permitió al Pogoń Szczecin transitar de forma vertiginosa, plantarse ante Brais y Grelka anotó el peligroso 3-0.

El Depor deberá intentar una épica remontada europea en Riazor. Será el día 20 a partir de las 20.00 horas cuando el Juvenil A blanquiazul buscará su partido perfecto.