Una de las iniciativas de la Policía Local más populares es la de Agente Tutor. La Policía Local lleva nueve años con este programa, en el que seis agentes especialmente formados ayudan a los adolescentes en un momento complicado, en el que pueden mostrar conductas problemáticas, con el oficial José María Lago al frente. El éxito les ha llevado a añadir dos agentes más al grupo, según se ha conocido esta misma semana.
La Jefatura de la Policía Local ha celebrado un concurso interno para cubrir dos plazas más en el programa, que finaliza la semana que viene. Pero ahí no terminan las noticias: La Asociación Nacional de Agentes Tutores (ANAT) ha decidido condecorar a los cinco primeros policías coruñeses que prestaron servicio en este programa “como referentes en toda Galicia en materia policial, siendo unos profesionales muy entregados a la protección de menores”.
Entre sus tareas se encuentra la de la de impartir charlas en los colegios con varias temáticas. Entre ellas, el uso de las nuevas tecnologías, pero también sustancias estupefacientes y de igualdad y violencia de género. Reciben a menudo peticiones de padres, profesores, Servicios Sociales y de los mismos menores que requieren orientación y presumen de conocer a casi todos los chicos problemáticos de la ciudad, después de años de interactuar con ellos.
Los policías de Agente Tutor son también los responsables de hacer “controles de menores” que se realizan habitualmente en algunos puntos de la ciudad para asegurarse de que los jóvenes que aun no tienen 18 años no consumen alcohol, por ejemplo. Además, vigilan que tampoco estén en posesión de narcóticos. Normalmente hachís.
Algunos de estos puntos, como el de la plaza de San Pablo, donde se reúnen muchos adolescentes, han sido el escenario de peleas. El incidente más grave se registró el cuatro de febrero de este año, cuando una disputa por las canchas de baloncesto acabó con un joven apuñalando a otro. Aunque hay que recordar que las heridas que recibió no fueron graves.
Otro punto que suelen visitar es la plaza de Maestre Mateo, o los alrededores de Méndez Núñez. Allí se suelen reunir para charlar y tomar algo, como una hamburguesa o un refresco, y esos son los puntos que los policías de Agente Tutor visitan cada fin de semana.
Aunque en un momento dado puede producirse algún conflicto que acabe en agresión, la Policía Local asegura que los incidentes graves son excepcionales. En muchos casos, programa como Agente Tutor tienen como objetivo identificar los síntomas antes de que se vuelvan graves y ayudar al joven conflictivo a encontrar un nuevo camino.