Un Riazor asimétrico y que se adapte a ser también un estadio para grandes eventos culturales. Ese es el proyecto que maneja el Ayuntamiento de A Coruña de cara a la reforma que necesita el campo para acoger el Mundial 2030. Así lo aseguró el concejal de Turismo, Gonzalo Castro, durante una entrevista en la Radio Galega, en la que también reflexionó sobre el potencial turístico de los eventos deportivos y culturales como herramienta para atraer visitantes a la ciudad.
"Hai moitísima xente, incluso de fóra da comunidade autónoma, que ten elixido A Coruña para pasar estas datas de Nadal. Hai unha relación entre os eventos deportivos e culturais con esa afluencia de xente de fóra. Na San Silvestre hai máis dun 20% de inscritos que son de fóra. Antonte fun ver a Carlos Núñez no teatro Colón, sacou dúas persoas voluntarios do público e os dous eran de fóra. Iso dá imaxe da importancia dos eventos no turismo. Ves a ver algo que che gusta, como o Básquet Coruña, a San Silvestre, un concerto, por exemplo Touriñán e Carlos Blanco, e iso xenera unha dinámica de xente que chega á cidade e alonga a estancia. É unha auténtica odisea atopar onde comer ou cear. Hai un nivel de ocupación moi alto para ser fóra do verán", aseguró Castro ante los micrófonos de la Radio Galega.
Y es que, como señaló, A Coruña tenía anteriormente al Deportivo como único polo de atracción turística deportiva, pero ahora al club se le une su sección de fútbol femenino, el potencial del hochey con el Liceo a la cabeza, el Leyma Básquet Coruña o las carreras, como la San Silvestre o el circuito Coruña Corre. "A guinda sería un ascenso do Dépor que esperemos que se poida culminar pronto", afirmó Castro, que señaló que todas esas opciones absorben el hecho de que A Coruña "non ten un equipo que o sábado xogue un partido de Liga de primeiro nivel e o mércores un de Champions. É importante o fútbol, pero tamén dende o punto de vista social e o apoio da Administración, que se diversifique o deporte".
Pero con el fútbol muy en la cabeza y el Mundial 2030 a la vuelta de la esquina, con A Coruña convirtiéndose en una de las sedes de España, el Ayuntamiento se encuentra ante un "reto importantísimo. É a cidade máis pequena do mundo en ser bimundialista. Ese dato fala da magnitude do que se ten conseguido e do reto, para o que está preparada a cidade, pero que se necesita investimento en infraestruturas, reforzo no sector hosteleiro". Al respecto, Gonzalo Castro se refirió a que una de las cosas más gratificantes con las que se encontraron durante el proceso de conseguir que A Coruña fuese una de las sedes elegidas por la FIFA, fue el trabajo realizado por los empresarios hoteleros, que hicieron que la ciudad tuviese una puntuación en la categoría de hoteles por encima de ciudades mucho más grandes como Bilbao o San Sebastián.
"Agora o que nos falta é resolver as necesidades que temos nunha infraestrutura básica como Riazor, que se ten que adecuar ás necesidades do Dépor tamén. Hai que prensar en grande, en si pode volver a Primeira, e tamén en reforzar a captación de visitantes e apostar polo que aposta todo o mundo: que sexan recintos multiusos, porque un estadio de fútbol co gasto que ten de mantemento non pode abrir só 20 días ao ano", afirmó Gonzalo Castro en la Radio Galega. Así, se refirió a que esta es la línea de trabajo que siguió el Atlético de Madrid a la hora de construir el Wanda Metropolitano y también el Athletic de Bilbao con San Mamés: ."Hai que aproveitar o Mundial e facer un Riazor cinco estrelas para a FIFA e para que acolla eventos non deportivos".
El trabajo del Ayuntamiento, explicó Castro, pasa ahora por realizar todo el trabajo de licitación para afrontar un inicio de las obras que no debería ir más allá del verano de 2026, ya que se extenderán durante tres años al ser Riazor un recinto que está siendo usado, lo que hace más compleja la obra. Así, esperan tener listo el estadio en el verano de 2029, ya que un año antes del Mundial la FIFA también realiza eventos con patrocinadores en las sedes elegidas.
Al respecto del aforo definitivo que tendrá Riazor, pese a que en un principio se habló de 48.000 localidades, Gonzalo Castro rebaja ahora el número a 42.000, en un aforo semejante al que tiene la Real Sociedad en Anoeta. La razón es que A Coruña quiso apostar por ser sede hasta las semifinales, pero la FIFA ha situado el estadio de Riazor solo como espacio hasta los octavos de final. Así, el nuevo campo tendría un aforo de 42.000 personas, 39.000 de público y el resto destinado a espacio VIP.
"Será o estadio que o Dépor debería ter, sabemos que houbo unha lista de espera para facerse socio, hai gradas como Maratón e Pabellón nas que é unha odisea. Temos que deseñar o estadio pensando que o aforo o teñamos que focalizar nas gradas con máis demanda", comentó Gonzalo Castro. De esta manera, apostó por una idea que en España no es tan habitual, pero sí en otros países futboleros como Inglaterra o Alemania: los estadios con gradas asimétricas. Como ejemplo puso los campos del Liverpool o el Borussia Dortmundo. En Alfield Road tiene, señaló Castro, una grada de animación muy amplia, que da cabida a una alta demanda de entradas con precios populares y gente joven. "É algo que se demanda tamén na Coruña. Moita xente non vai a Tribuna ou Preferencia polo prezo e porque non é o ambiente que queren", aseguró Castro, que señaló que el Ayuntamiento ya trabaja en esa redefinición de Riazor para adaptarlo a la demanda social.