La operación retorno de Semana Santa parecía muy tranquila hasta que, en plena hora punta de entrada en A Coruña, se empezó a montar un atasco monumental. Quienes no habían visto procesiones durante estos días de descanso tuvieron la oportunidad de participar en una, aunque lo cierto es que no duró demasiado.
Un coche sufrió una avería en plena AP-9, justo en la entrada a la ciudad, lo que causó enormes retenciones, de hasta siete kilómetros, según la Guardia Civil de Tráfico, puesto que era justo la hora en la que muchas personas regresaban de sus vacaciones.
Las colas no duraron demasiado, porque enseguida se apartó el vehículo averiado y la circulación se normalizó en torno a las 21.05 horas.