La ruta a París, cancelada el pasado mes de marzo tras una decisión unilateral de la compañía Vueling, saldrá de nuevo a concurso “lo antes posible”, según indican fuentes municipales. La Administración, además, está estudiando las posibles acciones legales a emprender contra la aerolínea por el incumplimiento del contrato, el cual fue rescindido antes de cumplirse el plazo mínimo de un año que planteaba el documento.
La Junta de Gobierno del Consorcio de Turismo recibió ayer la notificación de que la conexión con el aeropuerto de Orly se había cancelado definitivamente. Tras esta noticia, el representante de la Marea Atlántica en el organismo, Alberto Lema, lamentó el desenlace, asegurando que “o paso do tempo nunca mellora unha mala idea. Xa en outubro de 2021, cando se anunciou o concurso para esta ruta, avisamos de que estaba mal enfocada e non respondía ás necesidades de Alvedro”.
La ruta, “cunha frecuencia moi baixa”, no atendía a las necesidades de los vuelos de negocios ni del turismo, según Lema. “Só se buscaba o anuncio dunha ruta internacional para tapar a perda de Heathrow, da que o aeroporto aínda non se recuperou. E resultou ser un moi mal uso dos cartos públicos”, sentenció. Este medio ha intentado ponerse en contacto con la aerolínea para saber si se estudian otras alternativas tras la cancelación del enlace, pero no ha obtenido respuesta.
El pasado 22 de marzo fue la última vez que Vueling conectó Alvedro con París. A partir de ese momento, la compañía ofrece volar hasta la capital gala a través del aeropuerto de El Prat, en Barcelona, pero el enlace también es víctima de una merma de frecuencias a raíz de la pandemia.
Ya en aquel momento, desde el Consorcio de Turismo aseguraban que si la compañía no ofrecía alternativas viables para suplir la conexión parisina, el contrato volvería a salir a concurso, para que una nueva aerolínea lo cubriese lo antes posible. La alcaldesa insistió en este aspecto hace tan solo unas semanas, mientras el edil de Turismo, Juan Ignacio Borrego, aseguraba hace unos días que el organismo turístico estaba estudiando todas las posibilidades existentes una vez tuviese respuesta de la aerolínea.
Cabe recordar que en abril del pasado año, Vueling cerró su base en el aeropuerto de Alvedro, la cual aseguraba la compañía que no era lo suficientemente eficiente como para mantenerla abierta. Fue uno de los primeros golpes que la terminal coruñesa sufrió por parte de la compañía catalana.
En los tres últimos años ha habido hasta nueve cancelaciones de Vueling en A Coruña. Málaga, Sevilla, Bilbao, Valencia, Londres-Heathrow, Tenerife Norte, Gran Canaria y Palma de Mallorca son los enlaces que la aerolínea ha dejado de operar –la mayoría de las rutas fueron trasladadas a Santiago–, a lo que el mes pasado se sumó París. La retirada de la base coruñesa supuso una oleada de críticas por parte de la oposición en el Ayuntamiento de A Coruña. Desde el grupo popular, por ejemplo, pedían un plan municipal para Alvedro, para afianzar las conexiones existentes y recuperar las que se habían perdido.
Hace tan solo dos semanas se daban a conocer los datos de viajeros del primer trimestre. Eran, según AENA, 274.430 los pasajeros que habían usado la terminal coruñesa durante los tres primeros meses del año, un 5,7% menos que en el mismo periodo de 2019, antes de la irrupción del covid.
No obstante, pese a que la comparativa no era positiva, el concejal de Turismo llamaba a no caer en el error de comparar los datos con los del 2019, que “eran número de récord”, “máximos históricos” del aeródromo. Y es que comparando las estadísticas con las de años anteriores, como el 2018 o el 2017, el primer trimestre de 2023 sale vencedor.
Los pasajeros hasta ahora hacen pensar que Alvedro cerrará el año alcanzando, e incluso superando, el millón de viajeros. Y es que en el último mes se han establecido ya las nuevas conexiones con Milán y Ginebra, que ya han registrado varios llenos, y se espera, para el tramo final del año, que comience a operar la ruta con Ámsterdam, conexión que está a la espera de que se solucione la situación en Schipol, que necesita que se liberen slots tras un conflicto entre las aerolíneas y el Gobierno neerlandés. Conflicto que, pese a tener una resolución en favor de las operadoras de los vuelos, todavía tiene opción para el recurso de la administración.