Los controladores aéreos del aeropuerto de A Coruña se suman al nuevo paro parcial convocado para el mes de marzo. Será durante cuatro jornadas, en horario de 16.00 a 19.00 horas, y afectará a todos los vuelos que operen en esa franja. La Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) y CCOO decidieron ayer extender al mes que viene la protesta en las dieciséis torres de control liberalizadas por la falta de avances en la negociación con la patronal Apcta, que engloba a los proovedores privados Saerco y Skyway, tras cinco días de huelga llevadas a cabo entre el 30 de enero y ayer.
Esta, sin embargo, no tuvo incidencia en la operatividad de Alvedro, ya que Saerco decretó el 100% de servicios mínimos en las jornadas de protesta. Los nuevos paros, que también se darán en el aeródromo de Peinador, serán los días 7, 14, 21 y 29 de marzo, según anunciaron ayer los sindicatos en un comunicado. Estos, además, criticaron la actitud de Saerco, “que se ha mostrado contrario a conseguir ningún tipo de acuerdo y que, incluso, ha retirado su propuesta inicial, empeorando aún más las condiciones de sus trabajadores”. Por ello, consideran que la huelga es la única posibilidad de denunciar los recortes salariales y “la precariedad” que se vive en las torres.
Este fin de semana se produjo un nuevo desvío de la compañía Vueling al aeropuerto de Rosalía de Castro, en Santiago. Con un 100% de ocupación, el enlace VLG1290 procedente de Barcelona a última hora de la tarde del domingo tuvo que cambiar su ruta debido, una vez más, a la falta de autorización de la maniobra nocturna por parte de la compañía. El sector denuncia que esta restricción afecta a los usuarios y que podría desencadenar desvíos en días con viento superior a los diez nudos de componente en cola, como está previsto hoy.
Desde la plataforma Alvedro Vuela Más Alto consideran “excesiva” la restricción, y es que todas las aerolíneas han autorizado esta maniobra desde su puesta en marcha el 2 de diciembre de 2021, a falta de Vueling. Por ello, instan a dejar esta política de lado para evitar nuevos inconvenientes para los viajeros. La aproximación de los aviones por la cabecera sur de la pista se implantó para reducir los desvíos en condiciones de viento adversas. El pasado miércoles otro vuelo de la compañía, procedente de Londres-Gatwick, tuvo que ser desviado por no tener la práctica autorizada.