Queda menos de un mes para la puesta en marcha de la nueva estación provisional de tren de A Coruña, que albergará los diferentes trayectos ferroviarios que rutinariamente, y desde hace más de ocho decenios, lleva operando San Cristóbal. No obstante, con motivo de diferentes pruebas técnicas antes de su correcto funcionamiento, la actual estación herculina se prepara para unas nuevas jornadas de caos.
Durante los días 10, 11, 12 y 13 del próximo mes de diciembre, quedarán interrumpidos todos los servicios entre A Coruña y Santiago de Compostela, provocando el uso de autobuses fletados por Renfe como alternativa.
Sin embargo, en esta ocasión el problema será algo más que el cambio de tren a bus. En total, serán hasta diez los trenes con origen o destino A Coruña suprimidos durante estos cuatro días. Y es que, además del aumento en la duración del desplazamiento –alterando los 28, 35 o 40 minutos del trayecto en tren a los 50 o 55 que tardaría el autobús–, algunos usuarios no tendrán alternativa alguna.
El aparcamiento de la estación de tren se volverá a convertir en una improvisada parada de bus para acoger a tanto transporte público. De hecho, hasta diez trayectos serán los suprimidos tras no poder hacer frente a la inmensa demanda de buses que supondrá albergar todos los traslados hasta la capital de la comunidad gallega.
Los afectados son, en muchos casos, viajeros con el lugar de trabajo o de estudio en la ciudad compostelana o incluso, en Ourense o Vigo. Del 10 al 13 de diciembre, el que solían coger ya no estará a su disposición, teniendo que alterar sus planes. En algunos casos se plantean cambiar de tren, intentando no afectar de forma significativa a su rutina y en otros –en los que quizá afecte más a sus horarios– hasta barajan la posibilidad de buscar alguna residencia momentánea para poder pasar esos días en su destino, según apuntaron algunos de los viajeros más recurrentes en estos trayectos.
La supresión de los trenes de primera hora de la mañana, como el de las 05.30 horas con destino Vigo, es la que más afecta a usuarios que estudian o trabajan en Santiago, Pontevedra, Vigo o sus alrededores.
En total, serán unos veinte los cortes suprimidos, ya que además de los diez de A Coruña, otros tantos afectan a Santiago de Compostela en algunos trayectos con destino Vigo, Vilagarcía y Ourense.
La estación provisional, en fase de construcción desde finales del pasado mes de julio y ejecutada con una inversión de unos 4,5 millones de euros, se prepara para su puesta en funcionamiento. Aunque no estaba prevista en el proyecto inicial, permitirá que desde finales de este año hasta el primer trimestre de 2026 se realicen las obras necesarias en el actual edificio de la estación, manteniendo la esencia actual de una fachada de 81 años de historia.
Desplazada a escasos metros de la terminal actual, en dirección Santiago de Compostela, esta momentánea y moderna infraestructura permitirá realizar las operaciones rutinarias de la estación de San Cristóbal, o por lo menos, intentarlo.
Con la limitación de dos vías y dos andenes menos –dejando la estación con cuatro y dos, respectivamente– ultimará los flecos para su correcto funcionamiento de cara a su inmninente inauguración.