Los jóvenes acababan de finalizar los exámenes del EBAU, la antigua selectividad, y salieron en la noche del jueves para pasárselo bien. Al día siguiente, por primera vez en mucho tiempo, se registraron destrozos en Méndez Núñez. En esta ocasión, en una exposición que había organizado la Red Acampa para denunciar el hambre que sufren los refugiados. Varias piezas amanecieron rotas o desaparecidas, como una muestra de comida basura en el espacio a la obesidad, la que denunciaba la guerra o la que rebuscaba en un contenedor de basura. La organización del evento lo achaca al botellón, mientras que la alcaldesa, Inés Rey, lo niega.
Desde la organización no se tomaron el incidente tan mal como podía esperarse. “Ya contábamos con esta posibilidad e aunque barajamos cerrar con una valla el perímetro de ese espacio lo descartamos. Este vandalismo forma parte de la reflexión que Red Acampa quiere traer a la ciudad”, explicó el coordinador del Movimiento Acampa pola Paz, Xosé Abad. “El año pasado fue aún más grave puesto que rompieron algunas de las fotografías y se llevaron otras. Por su contenido podría tener además cierta intencionalidad”, añadió.
Abad achaca lo ocurrido con el botellón o una gamberrada pero “eso también nos debe llevar a pensar que la educación que estamos dando a los jóvenes no está bien enfocada”. Red Acampa tratará, en la medida de lo posible, de reponer las piezas. “En todo caso, servirá de ejemplo de la sociedad en la que estamos inmersos”, concluyó el coordinador.
Por su parte, la alcaldesa, quiso condenar “cualquier acto de vandalismo que se cometa en la ciudad y concretamente este”, declaró al tiempo que calificaba lo sucedido de “lamentable acto de vandalismo”. No negó que tuviera que ver con el ocio nocturno, que pidió que se disfrutara con medida: “Se puede salir y celebrar en su libertad individual lo que considere para pasárselo bien pero nunca puede emprenderla con el mobiliario urbano (papeleras, contenedores, bancos, esculturas, exposiciones y demás. Este tipo de comportamientos incívicos no tienen cabida en la ciudad y la Policía actuará contra quien no sepa comportarse”.
Rey dio por sentado que fueron estudiantes recién salidos de los exámenes los que cometieron los actos de vandalismo. “Entiendo que acababa la EBAU, que había que salir a celebrar, todos lo hemos hecho cuando acabamos la Selectividad, pero uno puede salir y se puede comportar. No son cuestiones incompatibles”. Lo que sí negó es que tuviera algo que ver con el botellón: “No hay botellón en Méndez Núñez desde que antes de la pandemia (a finales de 2019 ya no se celebraba) fuera prohibido por nosotros”.