El caso de Diego Bello, coruñés asesinado presuntamente a manos de la Policía Nacional Filipina en enero de 2020, tiene nuevos episodios en los que los abogados contratados por la familia, pretenden darle un nuevo impulso al procedimiento y conseguir que se celebre, por fin, el ansiado juicio para el esclarecimiento de los hechos.
Este semana se producirán dos nuevo hechos. El primero de ellos será la presentación la solicitud de cambio de jurisdicción ante el Tribunal Regional de Surigao. Dicha solicitud será presentada con el único fin de evitar posibles presiones sobre el juez que debe de resolver el procedimiento, y que el caso sea llevado a la capital, Manila, al tratarse de un asunto de suma importancia y con una gran relevancia internacional.
En segundo hecho será una reunión con los responsables de los bancos donde Diego tenía sus fondos y así, poder liberarlos cuanto antes. Por último, se solicitará también por parte de los abogados ante el Tribunal una orden de prohibición de abandonar el país para los tres policías acusados de ser, presuntamente, los responsables del asesinato del coruñés, pudiendo esta medida complementarse con el lanzamiento de una alerta a la Interpol.