Gatocan: afortunada en el juego y desafortunada en protectores

Gatocan: afortunada en el juego y desafortunada en protectores
Colaboradores de Gatocan celebran su premio

Podría aplicarse todo un refranero popular a las consecuencias de la Lotería de Navidad para la Gatocan, aunque la más ajustada podría ser eso de que el dinero no da la felicidad. Y es que, después de repartir casi cien millones de euros en participaciones del Segundo Premio, la sensación en la protectora de Coirós dista mucho de ser idílica o incluso de satisfacción. Desde el relativamente fatídico 22 de diciembre no solamente ha visto alterada su normal actividad debido al "acoso y derribo" en redes sociales, sino que ha perdido un importante número de apoyos en forma de socios de y colaboradores. 

 

Stories Gatocan
Una de las stories denunciando la situación


El principal error es de base y de concepto, ya que a pesar de que el décimo y sus participaciones han ido unidos al nombre de Gatocan, en ningún momento el retorno económico ha sido a nivel protectora. Se trata de una ganancia a nivel personal entre trabajadores, colaboradores y empresas vinculadas, pero que cada uno organiza y destina a lo que cree oportuno a nivel individual. Sin embargo, algunos de los socios se han desvinculado por, básicamente, pensar que Gatocan 'está forrado' y que la colaboración de ocho euros mensuales ya no es necesaria. "Se deben pensar que nos sobra el dinero, pero Gatocan en realidad lo que hizo fue repartir esa suerte a las 4.500 personas que compraron la participación", matiza Teresa Prado, responsable de redes sociales. "Lamentablemente, ya hubo una mujer en su día que vaticinó esto: cuando leyó que había ganado el número jugado por Gatocan pensó que no les podía haber pasado nada peor", añade la colaboradora, que parece relatar una historia propia de la canción de Los Suaves 'Maldita sea mi suerte'.

 

Story Gatocan
Piden recuperar los apoyos de la protectora


En las últimas horas se han sucedido mensajes a la inversa, en forma de llamamiento desesperado que busca frenar la fuga de colaboradores. Algunos simpatizantes de Gatocan se han referido a la situación como "egoísmo" e "hipocresía" navideños e instan a una "sociedad fría y sin principios" a ayudar a las protectoras que "limpian las acciones de unos pocos". Y es que, más que nunca, el encargado de repartir millones ha sido afortunado en el juego y desafortunado en protectores. 

Gatocan: afortunada en el juego y desafortunada en protectores

Te puede interesar