Se llevaron un disgusto quienes, seguramente por inercia y desconocedores de las últimas advertencias por parte del Ayuntamiento, estacionaron sus coches en los arcenes de la Tercera Ronda.
El encuentro contra el Arenteiro del último fin de semana de abril había marcado un antes y un después en esa tendencia: el Ayuntamiento utilizó las redes sociales para advertir a los conductores que, todos aquellos que decidieran invadir la también llamada avenida Real Club Deportivo, serían multados. También ubicó conos. A lo largo de todo el día, y como quiera que la convocatoria de la fiesta empezó a las 10.00 horas, la Policía Local patrulló el entorno y se llevó una decena de vehículos.
Tanto los testigos de la retirada como quienes se disponían a acceder a la ciudad desde poblaciones cercanas fueron muy críticos con la decisión, en un día que la ciudad estaba desbordada por la llegada de aficionados de toda Galicia. Por ejemplo, señalaron al aparcamiento de la zona de Os Mariñeiros como otro punto conflictivo.