La inauguración de la capilla de Los Rosales, por un lado, y el Centro de la Mujer, por otro, centraban la portada del periódico tal día como hoy pero en el año 2000. En 1950, además de la extensa visita del cardenal Quiroga Palacios a la ciudad, de la que se daba cuenta un día más, el diario destacaba el gran éxito del concierto del pianista coruñés Rafael Vázquez Sebastiá, aplaudido por sus paisanos en el teatro Colón. Hace cien años, el 24 de marzo de 1925, era noticia el mal estado de la pavimentación de la mayoría de las calles de la ciudad, motivo por el cual el alcalde Manuel Casás, recién estrenado en su cargo, proponía un plan intensivo de cuatro años para arreglar el firme en mal estado, comenzando por la zona de La Marina y los Cantones.
El arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, inauguró la capilla provisional que prestará servicio a los feligreses de Los Rosales. El prelado bendijo las instalaciones durante una ceremonia a la que asistieron numerosos vecinos de la zona. El templo está situado en un bajo alquilado, de 270 metros cuadrados que sufraga el obispado. Además de capilla, dispone de locales para la catequesis y de un despacho parroquial. Los residentes esperan que el Ayuntamiento les ceda unos terrenos para construir una iglesia, pues ahora mismo es solo pastoral autónoma y les gustaría llamarla Nuestra Señora de Los Rosales. También el Ayuntamiento deberá ceder unos terrenos para construir una iglesia. Los vecinos, que hasta ahora acudían a la iglesia de los Escolapios, esperaban con ilusión esta inauguración, sobre todo su párroco, Antonio Rodríguez, que estos días todavía atendía los últimos detalles.
Por otra parte, el alcalde de A Coruña, Francisco Vázquez, inauguró el nuevo Centro de la Mujer, en la plaza de los Castaños. Durante el acto, Vázquez aseguró que el siglo XX se ha caracterizado por los grandes cambios en este aspecto aunque todavía queda mucho y afirmó que el reto más importante al que se enfrenta la ciudad en estos momentos es la integración de la mujer en los campos educativo y laboral.
Después de su destacada actuación en diversos puntos de España y el extranjero, entre ellos Nueva York y Londres, tocó por primera vez ante “su” público Rafael Vázquez Sebastiá, que fue recibido y aclamado como “profeta en su tierra”. El selecto auditorio que acudió al brillante recital en el teatro Colón a beneficio de la Cruz Roja no tuvo que hacer ninguna concesión ni obedecía a influencia localista y hubiera reaccionado igual de tratarse de otro cualquier artista que demostrase su valía como lo hizo el teclado vehemente de Sebastiá. El magnífico pianista coruñés interpretó la “Polonesa” de Chopin y la “Danza de fuego” de Falla. Para corresponder a las entusiastas demostraciones del enorme concurso que llenaba el Colón interpretó de propina “Farruca”, de Falla, y una sonata del padre Soler. Nuevas ovaciones premiaron esta grata extensión del programa.
La comisión permanente aprueba el proyecto de pavimentación de las avenidas de La Marina y Montoto. El señor Vila manifestó que era necesario prescindir de la subasta porque resulta urgente realizar la obra. El presupuesto total es de 54.000 pesetas. El alcalde, Manuel Casás, dice que es necesario corregir las pésimas condiciones en que se encuentran la mayoría de las calles de La Coruña por su destrozo y abandono. Cree que en cuatro años puede transformarse todo el pavimento de la ciudad, para lo cual se distribuirán así los plazos: primer año, la avenida de La Marina y los Cantones; segundo año, el Ensanche; tercer año, Sánchez Bregua, Olmos, San Andrés, Castelar y, cuarto año, el resto de las vías. También se aprueban en esta primera sesión del pleno los nombramientos de los concejales José Amenedo, Manuel García Rey y Santiago Piñeiro.