A.F.G., una carballesa de 43 años de edad está ingresada en la UCI del Hospital de A Coruña, a donde llegó la madrugada de este lunes en estado crítico como consecuencia de la brutal agresión que sufrió por parte de su pareja, con la que tiene dos hijos. El supuesto autor del nuevo acto de violencia machista, J.A.C.S. de 45 años, huyó del hogar familiar tras cometer el mismo y fue detenido alrededor de las 10 de la mañana en los controles de acceso a la Comandancia de la Guardia Civil de A Coruña cuando acudía a entregarse.
La víctima había presentado una denuncia contra su agresor hace cosa de un año, pero no por malos tratos sino por “insultos y vejaciones”, según informó el delegado del Gobierno, José Miñones, durante la visita que ayer realizó a Ponteceso. El representante gubernativo también destacó que “dentro del estado crítico”, la víctima “evoluciona favorablemente” del fuerte traumatismo craneal sufrido.
Los hechos sucedieron sobre las 2.45 horas de ayer en Fontecaldeira, 21, un lugar atravesado por la carretera de Sísamo. Fue un vecino el que encontró a la mujer tirada y ensangrentada en la calle tras haber sido agredida y alertó a la Benemérita.
Al lugar el 061 envió dos ambulancias de soporte vital básico, personal sanitario del PAC de Carballo y una ambulancia de soporte vital avanzado, que, tras una primera asistencia en el lugar, trasladó a la mujer herida al Complexo Hospitalario Universitario A Coruña (Chuac) al que, según fuentes sanitarias, llegaría “en estado crítico”.
El presunto agresor huyó tras la agresión por lo que los dos hijos de la pareja, que no está casada, se quedaron solos en casa. Por ello se movilizó a los bomberos, que accedieron al interior del inmueble tras romper el cristal de una puerta. Los abuelos maternos fueron quienes se hicieron cargo de los niños, que tienen 11 y 13 años.
La Policía Judicial de la Guardia Civil de Carballo ha abierto una investigación para esclarecer los hechos. A media mañana el arrestado fue trasladado a las dependencias de la Guardia Civil de Carballo, en donde permanecerá a la espera de pasar a disposición de la autoridad judicial.
El suceso ha causado gran conmoción en Carballo, en donde la víctima y su familia son muy conocidas por regentar una pastelería en el centro urbano. A.F.G. y sus otras dos hermanas llevan ya varios años al frente del negocio desde la jubilación de sus padres. Su agresor también trabajaba de forma esporádica en el mismo como repartidor. Antes lo hizo como empleado de una empresa auxiliar de Telefónica y luego como profesor de FP.