Un hombre murió tiroteado por la policía esta mañana, en torno a las once, en A Grela.
En estos momentos, la policía científica está en un descampado junto al polígono examinando el lugar donde se produjo la muerte para la investigación del caso.
Las primeras informaciones apuntan a que la víctima, que era un viejo conocido de la Policía Nacional, se vio implicada en un incidente en la avenida de Arteixo.
La Policía Nacional lo siguió hasta el polígono de A Grela en donde, durante el arresto, el hombre recibió el disparo que resultó mortal.
Ahora mismo, la zona está acordonada y hay un fuerte dispositivo policial de la Policía Científica y judicial.
Al parecer, este hombre llevaba una barra de hierro con la que estaba intentando romper los cristales de los coches en la zona de la avenida de Arteixo y poder robar así lo que encontraba en el interior.
Este incidente fue lo que provocó que comenzase la persecución policial. Una vez en A Grela, y en circunstancias que todavía se desconocen, la persecución continuó a pie hasta llegar a la zona donde se encuentra la nave de Bricodepot.
Ya a pie, empezó una pelea en la que, en un primer momento, intentaron detener a este hombre utilizando un taser pero, debido a que llevaba bastante ropa de abrigo, no funcionó porque la descarga no pudo llegar a la piel. Disparó al aire y luego a las piernas, pero eso no disuadió al sospechoso.
En la pelea, un policía acabó cayendo mientras forcejeaba con la víctima. Ya desde el suelo fue cuando disparó al sospechoso, que estaba armado con la barra de hierro. Tres tiros le alcanzaron, pero uno resultó mortal.
Por otro lado, debajo de la ropa el sospechoso, que es de origen cubano, parece que vestía un pijama del Chuac, una circunstancia que también se está investigando. Según fuentes policiales, ya había sido detenido el viernes pasado y puede que no estuviera robando en los coches, aunque sí estaba destrozando los cristales, porque esa es la razón por la que detuvieron el viernes pasado. Al parecer, tenía manía persecutoria y era esquizofrénico.
La Policía cuenta en su haber con las imágenes que grabó la cámara que lleva encima el agente y que se activa cuando se usa el taser, de manera que tienen varios minutos de grabación en los que se ve la agresión.
En el momento de los hechos, solo había una patrulla disponible porque la otra se encontraba trasladando a un detenido y fue esa única patrulla la que se enfrentó a ese hombre, que se encontraba fuera de sí y que era de gran tamaño.
Los policías nacionales implicados en el incidente se encuentran bien y no necesitaron recibir asistencia médica.
El Sindicato Unificado de Policía (SUP), a través de su cuenta en X, ha mandado su apoyo jurídico y psicológico para los agentes y piden medidas en la ciudad.