La sección primera de la Audiencia Provincial de A Coruña ha decretado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza al empresario en cuya nave del polígono de Espíritu Santo, en Cambre, la Policía Nacional encontró en diciembre un alijo de 7,2 toneladas de cocaína, ocultas en un cargamento de atún que viajaba en unos contenedores. El Juzgado de instrucción número cinco lo había dejado en libertad, contentándose con retirarle el pasaporte, pero ahora el sospechoso se encuentra ya en una celda de Teixeiro, a la espera de juicio
La Audiencia considera que la pena de prisión podría alcanzar los doce años de cárcel y que, al ser el administrador único de la empresa, existen suficientes indicios de su presunta responsabilidad. El riesgo de fuga es demasiado grande y como cuenta con medios económicos para abandonar el país y con el apoyo de personas que podrían ayudarle. Los jueces consideran que “existen indicios de que el investigado es integrante de una organización internacional dedicada al tráfico de sustancias”.
Además, como señalan en la sala, no se trata de una condena anticipada. La resolución de la audiencia es firme, lo que significa que el empresario no puede interponer un recurso.