Los mariscadores se concentraron ayer frente a la Delegación del Gobierno para protestar por la falta de diálogo de la Administración central sobre la ría de O Burgo. Manuel Baldomir, portavoz de la Cofradía, señala que se han negado a sentarse con ellos para acordar las ayudas que precisa el colectivo. Mientras tanto, la Xunta ha negado a la empresa que realiza la regeneración de la ría el permiso para sembrar marisco por su cuenta, después de que la cofradía rechazara hacerlo.
El motivo de la negativa es, precisamente, que no han recibido las ayudas que necesitan para subsistir a la espera de que la ría vuelva a ser productiva: ahora que han terminado las labores de dragado, hay que sembrarla de marisco de nuevo, pero las crías tardarán por lo menos un año en crecer. Por eso la Cofradía espera que se prorroguen las ayudas.
Pero el Gobierno no ha enviado a nadie a las reuniones convocadas por los cofrades. “E cando lle dicimos que fixen eles a data, nos din que non poden, que non saben cando poderían ter que cambiar a axenda”, explica Baldomir, claramente molesto por la actitud de la Administración central.
Por eso los cofrades le advirtieron a la empresa, que pretendía comenzar la siembra la semana próxima, que no pensaban hacerlo pero Acciona, que encabeza la Unión Temporal de Empresas (UTE) que realiza las obras decidió contratar a otra empresa para hacerlo por su cuenta.
Sin embargo, un informe elaborado por técnicos de la Cofradía desaconsejan la siembra: todavía no se asentado el lecho de la ría, ni se han formado los bancos de arena donde debe enterrarse el marisco. La Xunta da por bueno el informe y por eso ha negado a la empresa que realice la operación. Baldomir reclama que “non nos deixen tirados” con las ayudas y asegura que lo que quieren es que la siembra de marisco se realice “coas maiores garantías”. Además, Acciona quiere realizar la operación cuanto antes, con millones de ejemplares y los cofrades sospechan que no se va a realizar en las condiciones óptimas.