Las obras que se están llevando a cabo en O Parrote servirán para dotar a esta zona de baño de unas instalaciones apropiadas. Pero no se trata tan solo de un lugar para darse un chapuzón o tomar el sol. Las gradas que llevan hasta el mar, de forma parecida a San Amaro o Riazor, están pensadas para acoger hasta 250 espectadores de competiciones deportivas, como piragüismo, o incluso otra clase de espectáculos al aire libre durante el verano.

La plataforma, además, tiene capacidad para unas sesenta personas que entrarían cómodamente, según explicó el director de la obra, Ricardo López. Pero O Parrote no estará listo para los eventos del verano, puesto que las obras, que durarán ocho meses, no concluirán hasta finales de septiembre, como  pronto.

El proyecto prevé que la infraestructura que se construye junto al mar cuente con una cantina 

Los trabajos, que realiza Aquática Ingeniería, tienen un presupuesto de 3,1 millones de euros y están financiados por la Xunta en un 90%. Por eso el presidente del Gobierno Autonómico, Alfonso Rueda, visitó las obras en compañía de la conselleira de Vivenda, María Martínez Allegue; la alcaldesa, Inés Rey, y el presidente de la Autoridad Portuaria, Martín Fernández Prado.

El presidente del Puerto expresó su confianza en el enorme éxito que tendrá la obra en un lugar de ya larga tradición de uso deportivo, puesto que son muchos los coruñeses que salen de La Solana, por ejemplo, para darse un chapuzón en el mar, como señaló la alcaldesa.

El jefe de obra explicó que se ejecutarán unas gradas en toda la escollera para que sirvan para que el público pueda ver las actividades náuticas. También están previstos una rampa de bajada, un futuro edificio de usos múltiples, y una escalera para los pantalanes donde habrá una zona de baño, una abierta y otra cerrada, con un calado escaso. Será necesario instalar doce cajones de 12x5 metros anclados con 30 pesos muertos de diez toneladas. “Es una zona de marisqueo y esta actuación se hace respetándola, por eso no se ponen pilotes”, explicó el director de obra.

Transformación

En todo caso, la plataforma no es más que un avance de lo que vendrá en los próximos años, que es la paulatina apertura del puerto a la ciudad, a medida que se transformen los muelles. Inés Rey recordó que ya hace cuatro años que se decidió habilitar esta zona de baño en colaboración con el Puerto y con Capitanía Marítima. Los trabajos comenzaron en 2021 y en 2022 se abrió al mar. “Pero en A Coruña somos cidade de mar e cidade de bar. Xa me están preguntando cando se abre a cantina”, bromeó la regidora.

Quien cerró el acto fue el presidente de la Xunta, que recogió el guante. “O responsable da execución di que rematarán a finales do verao, pero o plazo son oito meses. Veremos. Pero no da cantina non haberá fallo”, declaró, para luego recordar como, en los últimos años, se ha humanizado toda la zona de O Parrote con el apoyo de la Xunta, ganando miles de metros cuadrados de espacio público junto al mar.

A lo largo de décadas, los coruñeses han ido ganando con “sentidiño”, como lo denominó Rueda, terreno al mar, que antes llegaba hasta el Hotel Finisterre, para poner este espacio a disposición del público. “Sen olvidar nunca toda a riqueza que da o mar”, puntualizó.

El presidente autonómico considera que todas las ciudades que viven mirando al mar tienen instalaciones como la de O Parrote, pero miró más allá. “Agora toca transformar de forma definitiva esta cidade coa fachada marítima. É un obxectivo moi ambicioso”. Asegura que cuando el Ayuntamiento se lo planteó, la Xunta respondió afirmativamente desde el principio: “Hai que facer as cousas moi ben. Sen prisa pero sen pausa”.