Si es cierto aquello de que la forma de vestir es la manera en la que te presentas al mundo, pocas declaraciones de intenciones más claras podrían darse, en clave gallega, que portar prendas con elementos tan icónicos de la cultura pop local como las canciones ‘Eu chorar chorei’, ‘A rianxeira’ o ‘A saia da Carolina’. Algo así pensó Pablo Ares, creador de una marca de ropa con la que, quizá, los usuarios de Instagram coruñeses ya se hayan topado: Paul Marcel Studio. Una firma que, bajo el lema ‘Galicia best place na terra’, vende a través de esta red social sudaderas, camisetas y tote bags con diseños que aluden a los mencionados éxitos del cancionero gallego.
El proyecto comenzó, explica Ares, “porque diseñé un par de cosillas para mí que no encontraba en ninguna parte, y cada vez que salía con ellas la gente me preguntaba dónde la había comprado”. “A la novena vez que me preguntaron por la sudadera de ‘A rianxeira’ pensé que había algo ahí. Y así estamos desde mayo o junio”, comenta. Si bien no está solo en el proyecto, Ares lleva “la voz cantante”, pero con “mucha gente de otros perfiles que nos está ayudando”. “Hay profesionales increíbles que por el hecho de que les gustaba el proyecto se han ofrecido a poner su granito y están con nosotros ayudándonos un montón”, dice.
Ares, diseñador gráfico, explica que “el nombre es por Marcel Duchamp (autor de la famosa escultura ‘Fuente’), un artista al que yo admiro y considero un poco el primer troll que hubo”. “Se metía en donde no lo llamaban, era un tío diferente que no se lo tomaba muy en serio. Esa es nuestra filosofía: hacer las cosas bien pero sin tomarlo muy en serio, y a ese tipo de gente queremos dirigirnos: a los disfrutones. Ya es muy complicada la vida como para darle tanta importancia a cosas que no la tienen”, dice.
Sobre por qué ese papel preponderante de la cultura pop gallega en sus diseños, responde que “la cultura gallega es increíble”, y que le da la sensación de que no se toma en serio. “Me pareció que se podía hacer ropa bonita y atractiva sin llevarla a este campo de ‘voy a ponerme la camiseta de coña para ir a la playa’”, explica. De hecho, en la bio de Instagram alude a su principal nicho de mercado: todos los gallegos raros. “Nos gusta la gente rara, nos parece cool esa gente diferente que anda a su rollo y es increíblemente molona. ¿Acaso ser raro no es un piropo?”, dice.
El éxito que está teniendo su iniciativa se vio impulsado con una anécdota divertida que le sucedió a finales de verano, durante el festival Caudal Fest de Lugo, cuando tiró, con permiso de la organización, una de sus prendas al escenario durante un concierto de Las Ginebras, y ellas la cogieron. “Pensaba que podía tirar la sudadera de ‘A rianxeira’, que estas chicas son muy majas, igual la cogían o la enseñaban un momento, pero que todo el mundo acabase cantando la canción es mucho mejor”, comenta. El vídeo de este entrañable momento puede verse en la cuenta de Instagram de Paul Marcel Studio.
No obstante, no ha sido el único roce con personalidades famosas. Si bien no desvela su nombre, asegura que “un famoso actor” les pidió ropa: “No se la mandamos, pensamos que era fake. Le contestamos que somos gallegos, no gilipollas. No llevábamos nada y nos pareció un vacile de alguien que se quería aprovechar. Luego nos enteramos que era verdad. Nos hubiese venido genial”. Otro revés sufrido por la marca tuvo que ver con el primer pedido: “Nos lo robaron entero”. Según explica, “dejamos la furgoneta con todo dentro para descargar, y al día siguiente no había nada. Supongo que querían buscar algo de dinero o no sé, y ya de paso… Así que si veis gente con prendas nuestras, las probabilidades de que sean robadas son altas”, comenta el diseñador.
Según explica, hasta el momento la marca ha tenido una “muy buena acogida”. “La gente gallega es muy gallega, muy de su tierra, y además con muy buen gusto”, opina Ares. Sin embargo, en línea con su filosofía hedonista y disfrutona, no se plantea demasiado qué hacer en el futuro. “No tengo ni la menor idea, vamos a improvisar”, sentencia.