El proyecto de remodelación de los Cantones pretende cambiar la entrada y salida del parking subterráneo, lo que afectaría a dos zonas tan transitadas como el Obelisco y la Casa de Paredes.
Según el criterio de Xosé Manuel Vázquez, uno de los dos arquitecto del proyecto (junto a Carmen Calatayud), la afección al parking es “de mejora”. “Desaparece la entrada al aparcamiento por Casa de Paredes. En el Obelisco se elimina la salida de vehículos, con lo cual, cuando llegas al aparcamiento, entras por una rampa y por un ascensor al propio centro de los Cantones. Digamos que se dignifica el acceso al garaje”, señala. Los ingenieros de Eptisa hicieron un estudio “impresionante” sobre cómo repercuten estos cambios y en general de los flujos internos asociados a la movilidad.
“Hubo que estudiar alternativas, porque eliminar una entrada y una salida va a aumentar el volumen de entrada y de salida en las otras que quedan”. En el caso de la calle Sánchez Bregua, “se evitarían todas esas interrupciones, ya que los coches podrían salir directamente, sin tener que ceder el paso”.
A su vez, está previsto que el proyecto de remodelación de la zona aporte un total de 9.500 metros cuadrados de uso peatonal. Una ubicación tan concurrida como el Obelisco recuperaría todo el espacio peatonal tras la modificación del parking. Avenida de la Marina y Entrejardines resultarían también resultarían beneficiados en este sentido. En esta última zona, al desaparecer la parada de autobuses, se genera un “jardín continuo que es una verdadera maravilla” y entonces “pasa a ser casi como un acceso a puerto”. Esto se debe a que también se eliminaría el tráfico de Santa Catalina, precisa Vázquez.
El carril bici y los buses interurbanos también sufrirán modificaciones. En el caso del primero, se implementará un sentido bidireccional, mediante una banda de tres metros. Además, se protegerá la zona del paso de autobuses o coches a través de un ‘buffer’ (parachoques), donde se colocarían los accesos a los autobuses o los aparcaderos de bicis.
Esta zona estará a su vez protegida por una zona de arbustos, en especial rododendros. “Esas plantas van a ir protegidas de la carretera, y a su vez enlazan con los propios jardines”, comenta el arquitecto encargado del proyecto de remodelación. Los árboles estarán presentes a lo largo de toda la avenida, desde la plaza de Mina. La vegetación servirá como una gran conexión de zonas verdes de los jardines de Méndez Núñez y los nuevos ejemplares estarán situados en Rúa Nova, Santa Catalina, Marchesi Dalmau y Alcalde Manuel Casás. En total serán 16 árboles y 500 metros de sombra.
En el caso de los buses interurbanos, ya no pararán en Entrejardines y darán la vuelta en la Subdelegación del Gobierno, circulando por Manuel Casás, al lado del teatro Colón, donde estará situada la nueva parada. Las paradas de taxi del Cantón Grande y de Correos se mantendrán en su ubicación habitual.
En cuanto a la tramitación, Xosé Manuel Vázquez asegura que solo falta el respaldo definitivo por parte municipal. “Todos los pasos previos necesarios ya se pasaron: Patrimonio, comisión asesora del Pepri y Costas. Solo queda que el Ayuntamiento apruebe el proyecto”.