Volotea se postula como aspirante a hacerse con los ‘slots’ que se liberen si se hace efectiva la fusión de Air Europa e Iberia. Así, si la Comisión Europea autoriza este verano la compra de la primera por parte de International Airlines Group (IAG), la compañía de bajo coste estaría interesada en operar las rutas que queden libres, como sería, en A Coruña, la conexión a Madrid-Barajas. Este enlace concentra más del 60% del tráfico total de la terminal coruñesa. “Volotea es la compañía idónea para operar las rutas que se puedan liberar tras la fusión, por ser una aerolínea española independiente, por nuestra demostrada capacidad operativa y alta competitividad”, señalan fuentes de la aerolínea.
La compra de Air Europa dejaría Alvedro bajo una situación de monopolio en la ruta a Madrid. Como resultado, afirmaron en varias ocasiones desde la plataforma Alvedro Vuela Más Alto, se perderían frecuencias y plazas y se incrementarían los precios. Volotea, sin embargo, afirma que “uno de nuestros propósitos es actuar como ‘remedy taker’ en aquellas rutas que dicte la Comisión Europea.
Además, tenemos un gran interés estratégico en crecer en España a medio plazo. Queremos ser una alternativa y ofrecer opciones adicionales de viaje de calidad y a precios muy competitivos a los clientes en las rutas que estén disponibles, si se confirma la transacción”. La aerolínea, además, anuncia que se ha fijado en Galicia para crecer y “valoramos incluso establecer alguna base en la comunidad si la fusión se aprueba y Volotea es elegida”.
De instalarse la base en el aeropuerto de A Coruña, se abriría la puerta no solo a establecer nuevas rutas, sino que otras históricas regresarían, como la de Sevilla, perdida en 2022, o Bilbao, cancelada el pasado mes de enero. La plataforma Alvedro Vuela Más Alto considera que “Volotea opta a ser “el máximo impulsor del crecimiento en plazas y rutas del aeropuerto”.