A Condesa es uno de los barrios más populosos de la ciudad y, con menos de cuarenta años, también uno de los más nuevos de Betanzos. Ahora, con la rehabilitación del Convento de Donas en curso, la apuesta del Gobierno de María Barral pasa por continuar su metamorfosis, sobre la mesa, están la creación de un nuevo área de esparcimiento y la reordenación de la plaza de Enrique Riego.

Así lo anunció la alcaldesa durante su visita a las obras del antiguo monasterio que, si se cumplen las previsiones de los responsables municipales, estarán acabadas en 2023.

A Condesa, unido al de As Cascas, es uno de los que anota más residentes, divididos en cinco comunidades de vecinos, pero su vida es corta:  cuatro decenios desde que empezaron a construirse las primeras viviendas y menos aún desde que se instalaron sus primeros moradores, muchos procedentes de otros barrios del ayuntamiento, como el casco histórico, que entonces experimentó una merma considerable de vecinos, o A Ribeira. 

En cuanto al área recreativa, la actuación, en colaboración con la Diputación de A Coruña, permitirá recuperar la zona verde situada entre la urbanización y la Nacional-VI. Un espacio que se ha ido degradando con los años y que “debe de ser aprovechado por los vecinos, dotándolo de mobiliario urbano y de un área acorde para el esparcimiento”, explicó la alcaldesa, María Barral.

La actuación se completará con el acondicionamiento de toda la zona, la retirada e materiales, y la creación de un sendero, así como la colocación de bancos y mesas, y la plantación de árboles, señalan desde Betanzos. Un seto servirá de pantalla sonora en las inmediaciones de la N-VI.

Además, también se realizará una mejora de la plaza de Enrique Riego para ordenar diferentes espacios de juegos, renovar el mobiliario urbano y realizar diversas actuaciones en materia de accesibilidad incorporando un circuito para bicicletas dirigido a los niños con pavimento adecuado para patinar o para recorrerlo en silla de ruedas, con señales de tráfico en todo el recorrido para que los usuarios puedan aprender seguridad vial al mismo tiempo que se divierten, detalló también la propia María Barral.

También se delimitará otro espacio con mobiliario urbano para que los menores puedan usar la pelota sin que esta actividad afecte al ocio y descanso de los mayores; y se creará un área para ‘xogos tradicionais'