El Concello de Miño da continuidad a su plan de mejora de las condiciones de seguridad con la ejecución de diversas actuaciones encaminadas a tal finalidad en diversos puntos del casco urbano.
Estos días se está procediendo a la renovación del vallado del parque de Rabazal, sustituyendo el antiguo por uno nuevo de material reciclado, el cual presenta una mayor durabilidad y una mayor seguridad.
Además, también se procedió a la instalación de pasamanos en la calle Regueiro, la calle Real y en la calle Estrada da Praia, todas ellas en zonas de pendiente y de gran tránsito de viandantes, promoviendo de este modo un notable incremento en la seguridad peatonal.
El alcalde, Manuel Vázquez Faraldo, señaló que “coa instalación deste novo mobiliario urbano buscamos repercutir de xeito directo nas condicións de seguridade da nosa veciñanza e facer un Miño máis acolledor para camiñar”.