Ni borrasca ni borrasco, que dirían las madres de antes. Los vecinos de Lañas desafiaron a las rachas de viento y las lluvias y celebraron la tercera edición de la Esfolla Popular, uno de los trabajos ancestrales de la comarca para cortar, recoger y clasificar el maíz, y que hoy en día se realiza con máquinas.

Ataviados con trajes de época  cedidos por el Ayuntamiento de Arteixo, medio centenar de  personas trabajaron en grupos para rememorar una jornada que antes era “un jolgorio”, explicaba el presidente de la asociación vecinal Fontesvellas –impulsora de la iniciativa–, Jaime Traba.

Al estilo de antaño, hubo reparto de dulces y licores como aguardiente o jerez para los “esfolladores” mientras la agrupación Triskell de Armentón amenizaba con temas tradicionales. 

Entre los trabajadores se encontraba María Dubra, la concejala de Cultura arteixana, natural de esta parroquia. “Desde o Concello apoiamos a recuperación das tradicións do municipio e eu sendo de aquí non podía faltar. Fixen moitas veces a esfolla e hai familiares e moita xente coñecida aquí, aínda que este mal tempo afectou á convocatoria, porque nas anteriores edicións houbo máis xente”, comentaba la edil.

Niños, jóvenes y mayores trabajaron sin descanso durante la mañana a pesar de los embates del temporal ‘Domingos’ y al mediodía se dispuso una comida para todos a base de sardinas con cachelos y jamón asado. Por la tarde se hizo una exhibición de la ‘peteleira’ y hubo charlas sobre estas tareas del agro.

Procedimiento

Jaime Traba explicó que antiguamente se cortaba la mazorca por  la base del tallo, amontonándose  en ‘moreas’ o ‘palleiros’ donde se dejaba madurar hasta el momento de la ‘esfolla’. “Se necesitaban a folla para facer xergóns facíase a chamada peteleira nos alpendres, un traballo que sempre se remataba cantando e comendo xuntos”.

En esta ocasión la ‘esfolla’ se realizó en una finca junto a la plazoleta ubicada en el cruce de Lañas con la carretera de Barrañán. “A ubicación cambia cada ano segundo onde se plante o millo, este ano a pena foi que a finca non se ve desde a carretera”, afirmaron desde la organización.

La asociación Fontesvellas cuenta con unos 300 integrantes y es la encargada de organizar otros eventos como la Festa do Roscón, que tiene lugar en primavera, y los festejos patronales de Santa Mariña. Desde el Ayuntamiento de Arteixo ensalzaron la labor del tejido asociativo para dinamizar la vida cultural y la economía del municipio.