Reportaje | De Dubai a Betanzos tras la estela de los García Naveira

Reportaje | De Dubai a Betanzos tras la estela de los García Naveira
La novia, a su llegada a la iglesia, del brazo de su padre, Jaime Lafora | Patricia G. Fraga

De Dubai a Betanzos tras la estela de los García Naveira. Desde los Emiratos Árabes Unidos a Galicia para una celebración cargada de emociones y significado, e inspirada en la memoria de Juan María y Jesús, en El Pasatiempo y en Betanzos. 


Elena Lafora Bueno, tataranieta de Don Juan e hija de Jaime, uno de los nietos de Doña Águeda, eligió Santa María do Azougue  para su enlace con su novio Martín Bellido. Él, aunque residente como ella en Dubai, es natural de Argentina. La misma tierra que en 1869 acogió al migrante Juan María y a la que el creador de El Pasatiempo reivindicó en muchos rincones de su obra más célebre, en cada una de las terrazas del singular espacio enciclopédico, desde la más alta hasta la inferior, sobre los terrenos de O Carregal.


Elena y Martín no solo eligieron O Azougue. Los elementos que, de una manera o de otra, hacía alusión a la ciudad y a su historia, se contaron por decenas y hasta para diseñar el vestido de novia se escogió a uno de Betanzos. Al más reconocido y exquisito: Jorge Vázquez.


El vestido, en crepe de seda y de cuello halter, lo complementaba un abrigo de guipur de manga corta ‘estilo Jackie Kennedy’ cerrado con una peonía de seda, la flor preferida de su madre, detalló Vázquez.


Como joyas, unos pendientes y una pulsera de pedida de platino y diamantes que pertenecieorn a Doña Águeda, bisabuela de la novia e hija de Don Juan.

 

Al salir del templo, los recién casados caminaron bajo los arcos de los 'mareantes', que interpretaron para ellos la Danza dos Mariñeiros. Otro guiño a Betanzos y a A Ribeira, el barrio donde nacieron 'Os Subela'. 

Tras la ceremonia, los novios y sus invitados se trasladaron hasta Mondoi, en Oza-Cesuras, donde se celebró la cena, en el Pazo de Santa Cruz


Don Juan, “el filántropo por antonomasia que, frente a la típica sordidez del capitalismo local, destacó por su generoso desprendimiento ininterrumpido”, estaría orgulloso de que, 130 años después de su regreso a su municipio para ofrecer educación, cultura, servicios asistenciales y sanitarios, empleo y calidad de vida a sus vecinos, sus descendientes, como custodios de la memoria sentimental de los García Naveira, conserven intactos su amor y entusiasmo por Betanzos.

Reportaje | De Dubai a Betanzos tras la estela de los García Naveira

Te puede interesar