No cabe duda de que muy grande tiene que ser el pesar y la tristeza para que se cierre el estómago de tal manera que no apetezca comer. Y que se va a decir de beber. Fe de ello dieron los vecinos de Cambre que, arremolinados bajo una gran carpa instalada en el campo de la feria, disfrutaron deglutiendo centenares de raciones de callos y hacer así más llevadera la sorpresa que supuso el anuncio, este pasado jueves, de que Óscar García Patiño había decidido dejar de ser su alcalde tras casi nueve años.

Pasó de este modo a un segundo plano la zozobra política local y se convirtió en protagonista, al menos durante algunas horas, el jolgorio, la fiesta y el recreo. La jornada lúdica se inició cuando todavía faltaba una hora para el rezo del ‘Angelus’. Un pasacalles inundó de música el centro de la capital del municipio. Ya superado el mediodía los asistentes se enfrentaron a un ‘menú’ a base de los mencionados callos, empanada, torta larpeira y café de pota. Todo ello regado con vino del país. Respecto a la calidad de este último no constan pronunciamientos.

Como en todo espectáculo gastronómico que se precie, era impensable que no hubiese verbena. En esta ocasión, los encargados de defenderla fueron, por este orden, el dúo integrado por Xilo y Carlos y la orquesta Fania Blanco Show. Para los menos clasicistas actuaron los dj Mon y David Expósito. La juerga finaliza hoy, a las 14.30, con una sesión vermú con Manu Contre.