Alberto Moris, cambrés nacido en 1986, forma parte de una estirpe de músicos conocida en As Mariñas y también ha triunfado como atleta, pero uno de los ‘palos’ que le quedaban por tocar, el de la literatura, acaba de hacerse realidad con ‘El abismo del sepulturero’ (Editorial Círculo Rojo), su primera novela, un thriller ambientado en el Londres de la época victoriana. “La historia rondó en mi cabeza desde muy joven”, comenta el autor, que presentó recientemente la obra en su municipio.

“Me encanta la literatura porque permite generar sentimientos en cada lector. Soy un poco nostálgico y me encanta lo antiguo en general. Ese Londres victoriano u otras ciudades de una estética similar sirvieron de telón de fondo para obras tan enigmáticas de literatura y cine como ‘El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde’ o ‘Jack el destripador’, cuyos ambientes me parecían idóneos para un relato como este”, dice Moris, quien pasó más de un año elaborando la historia.

La novela se sitúa en el invierno de 1886 y su protagonista, Henry, sepulturero de profesión, tendrá que buscar en el pasado el origen de su angustia recurrente. “Me llama la atención lo oscuro y siniestro de aquellas épocas. Los lugares misteriosos y las historias que se cuentan... me gustan Edgar Allan Poe, Stevenson, Conan Doyle, H.P. Lovecraft, Daphne du Maurier, Mary Shelley o Bram Stoker, entre otros”, apunta el escritor, quien trabaja como formador de equipos.

Aunque siempre pensó en publicar, nunca tuvo un objetivo lucrativo y se tomó la empresa con calma, escribiendo un poco cada día. La buena acogida del libro en su entorno –“ciertos allegados que se pueden permitir el lujo de disparar sin miedos han sido muy benevolentes”– le ha animado a continuar: “Ya hay un archivo pululando por ahí que contiene apuntes para lo que será mi segunda novela, más extensa que la primera y con una temática completamente diferente”, adelanta.

‘El abismo del sepulturero’ –cuyo diseño de portada es de Pablo Vieites– puede comprarse en Amazon o Fnac.es, entre otras plataformas.