El Depor de Imanol Idiakez se encuentra en la cresta de la ola actualmente y no quiere bajarse de ella. Las tres victorias consecutivas, los seis partidos ganados en las ocho últimas jornadas, las buenas sensaciones, la recuperación de todas las piezas —tras superar sus respectivas lesiones— y el desequilibrio y descaro de los canteranos han llevado al bloque coruñés a dar un paso adelante y presentarse como un candidato real al ascenso.
La irregularidad de los tres primeros meses y medio de competición ha quedado atrás. Idiakez ha dado con la tecla, ha encontrado el esquema y los jugadores adecuados, y el Depor funciona.
Las victorias sobre rivales de la parte alta como la Real Sociedad B (2-1), la Ponferradina (2-0) y el Celta Fortuna (1-2), así como la goleada del pasado fin de semana ante el Fuenlabrada (4-1) han supuesto un golpe encima de la mesa y un aviso a sus oponentes.
La afición deportivista empezó a tomar Logroño desde anoche, cuando ya se vieron las primeras bufandas y banderas por las calles del centro de la capital riojana, incluida la famosa Laurel —epicentro de la gastronomía logroñesa— y hoy harán lo propio con Las Gaunas, que tendrá más color blanquiazul que blanquirrojo con los cerca de 1.500 deportivistas que se esperan en las gradas para arropar a los suyos en el duelo con la SD Logroñés, a partir de las 18.00 horas.
Ambiente de fiesta, buen rollo entre ambas aficiones, incluso se espera alguna quedada conjunta antes de que el balón ruede sobre el césped.
Con todos sus efectivos sanos y Pablo Vázquez de regreso —tras cumplir un partido de sanción la pasada jornada por acumulación de tarjetas—, Imanol Idiakez sólo cuenta con la baja del máximo artillero del equipo, Davo, quien se perderá las dos próximas citas por su expulsión ante el Fuenlabrada.
El delantero almeriense Iván Barbero, que ha ido entrando poco a poco en los cuatro últimos partidos tras dejar atrás su grave lesión, es el mejor colocado para cubrir la ausencia de Davo y formar la dupla de ataque junto a Lucas Pérez.
En principio, el resto de la alineación debería quedar igual, salvo esa vuelta de Vázquez al eje de la retaguardia junto a Pablo Martínez.
Diego Villares y José Ángel se han asentado como una pareja clave en la medular. Soportan, equilibran y dirigen la orquesta cada día con mayor brillo y solvencia, pese al recado que Aitor Larrazabal, técnico de la SD Logroñés, mandó ayer al doble pivote blanquiazul.
"José Ángel y Villares, a veces, y digo a veces, no tienen la capacidad de sujetar a todo el centro del campo rival", afirmó el estratega del cuadro riojano durante la rueda de prensa que ofreció en Las Gaunas.
La velocidad, verticalidad y desequilibrio de Mella y Yeremay por los costados ha sido una de las claves del crecimiento del Depor en las últimas jornadas, así que no parece que a Idiakez se le pase por la cabeza sentar a ninguno de los dos, ya que —a día de hoy— son los mejores argumentos del Depor en ataque.
Y Lucas Pérez por fin ha recuperado su mejor versión. Además de seguir sumando asistencias —ya lleva nueve tras las dos que repartió el pasado domingo—, frente al Fuenlabrada marcó su cuarta diana del curso tras una cabalgada espectacular, y más para un jugador de 35 años.
Al Depor le espera enfrente una SD Logroñés inmersa en su peor crisis. Tras tres cambios de entrenador, con Aitor Larrazabal aún no sabe lo que es ganar después de cinco partidos en el banquillo. Tres derrotas y dos empates han cosechado los blanquirrojos desde que el entrenador vizcaíno tomó las riendas de la plantilla.
Los riojanos encadenan seis jornadas sin vencer y no saborean la victoria en Las Gaunas desde el pasado 5 de noviembre. De hecho, son el segundo peor local del grupo, ya que sólo han sido capaces de sumar 11 puntos de 33 posibles en su feudo.
La SD Logroñés se aferra, sin embargo, a la mejoría ofrecida en las dos últimas semanas -al menos en cuanto a sensaciones-, y a ese punto rescatado la pasada jornada en el estadio Johan Cruyff ante el Barça B con un gol en el minuto 86 del pichichi blanquirrojo, Jordi Escobar, que ha visto puerta en los dos últimos compromisos tras nueve partidos de sequía, y la asistencia del delantero austríaco Schmerböck, fichado en el mercado de invierno y que se estrenó con la camiseta de la SDL disputando el último cuarto de hora del duelo con el filial azulgrana.