“Algo llegará de aquí a final de mercado”, comentaba Óscar Gilsanz al término del partido contra el Levante. Queda justamente una semana y de momento la dirección deportiva del equipo blanquiazul, encabezada por Fernando Soriano, solo ha confirmado dos movimientos: la salida de Lucas Pérez y el regreso de Diego Gómez, que estaba cedido en el Arenteiro.
Muy poca actividad y bastante aún por hacer, con la contratación de un delantero y de un lateral izquierdo como objetivos prioritarios. Con la marcha de Lucas Pérez el Dépor pierde gol (llevaba cuatro el de Monelos) y un especialista en el balón parado y tendrá que buscarle, a contrarreloj, un sustituto de garantías.
Si ya en el mercado estival es complicado fichar a un ariete, más limitada es la ventana invernal y más aún teniendo en cuenta que el puesto de ‘9’ es uno de los más buscados por la mayoría de equipos de Segunda, con los que compite el Dépor.
La otra posición que al conjunto herculino le urge reforzar es la del lateral izquierdo. Cuenta solo con un jugador en ese puesto, Rafa Obrador, ya que Sergio Escudero es probable que tenga que pasar por el quirófano.
El carrilero pucelano sufrió en la pretemporada con el Dépor su tercera luxación en el codo izquierdo. Tardó ocho jornadas ligueras en poder competir. A principios de enero de este año sufrió un golpe en esa articulación que le ha hecho ya perderse los encuentros ante Málaga, Burgos y Levante. Dépor y jugador querían optar por un tratamiento conservador para que no tuviese que ser intervenido, pero todo parece indicar que será complicado eludir la operación.
A estas dos demarcaciones por cubrir se une la búsqueda de un mediocentro, pero de corte más creativo, que complemente a Diego Villares, José Ángel y Mfulu, con un perfil los tres más defensivo. Aunque podría encajar como medio ofensivo no se ve factible la vuelta de Rubén López. El centrocampista está cuajando una buena temporada en el Barca Atlètic, donde es un fijo en los planes de Albert Vázquez. Aunque empezó jugando en la medular, en los últimos partidos está ejerciendo como lateral izquierdo.
El Dépor tenía derecho a repescarlo en la ventana de fichajes de invierno en caso de que el futbolista no jugase un número de encuentros, unos guarismos a los que ha llegado. Por ello, si el cuadro blanquiazul quisiese traerlo de vuelta tendría que pagar, algo que, salvo sorpresa, no contempla. El club herculino también trabaja en las salidas. Una de las que está encima de la mesa es la de Davo, fuera de la lista ante Burgos y Levante. Hay equipos de Primera Federación interesados y ha habido propuestas de la primera polaca, donde se pagan salarios más elevados.