Representantes de los trabajadores y del grupo Nueva Pescanova han constituido este martes la mesa negociadora que abordará el Expediente de Regulación de Empleo de carácter extintivo planteado por la multinacional pesquera y que, según han trasladado los sindicatos, ya plantea una pequeña novedad: la compañía ha rebajado de 100 a 82 los contratos a extinguir (de personal técnico, no de las líneas de producción), según se recoge en la memoria explicativa entregada a los representantes de la plantilla.
Al término de este primer encuentro, celebrado en el Auditorio Mar de Vigo de la ciudad olívica, la presidenta del comité, Ana Caride (CC.OO.) ha explicado que la de este martes ha sido una "toma de contacto", en la que se ha constituido formalmente la mesa de negociación, con 13 representantes por parte de los trabajadores (11 de sindicatos y 2 representantes de una comisión a parte, solicitada por personal directivo afectado por el ERE) y cinco por parte de la empresa (dos responsables de Recursos Humanos y tres asesores jurídicos).
Así, la parte 'social' representa a los empleados de Pescanova España, Novapesca Trading, Nueva Pescanova (las tres sociedades con sede en Chapela) y el centro de Pescanova España en Madrid. Además de la constitución de la mesa y la firma del acta correspondiente, la empresa ha entregado a los representantes de la plantilla la memoria justificativa del ERE.
En ella, han explicado Ana Caride y el responsable de Industria en CC.OO. Vigo, Celso Carnero, la empresa rebaja a 82 los posibles despidos en el marco de esta regulación. Con todo, han señalado que la intención de los sindicatos es que ese número sea menor y que se adopten medidas alternativas menos traumáticas.
"Nosotros venimos a negociar de buena fe, nuestra intención es luchar para que esto sea lo menos doloroso posible", ha señalado la presidenta del comité, que ha confirmado que, el próximo 5 de octubre, tendrá la primera reunión propiamente para negociar, en la que la empresa detallará los argumentos y razones para la presentación de este ERE.
Ana Caride ha recordado que ambas partes tienen 30 días para alcanzar un acuerdo, y ha trasladado su esperanza de que la empresa, y especialmente Abanca, el principal accionista, muestren su "buena disposición" para llegar al mejor pacto "posible".
Celso Carnero ha valorado que, ya antes de empezar esas negociaciones, "la presión" ejercida por el comité y los sindicatos ha logrado que la pretensión de 100 despidos se haya rebajado a 82. Asimismo, ha apuntado que, además de negociar las condiciones del expediente, empresa y representantes de los trabajadores deberán "hablar del futuro".
Por su parte, el responsable de la Federación de Industria de UGT Vigo, Rubén Pérez, también ha destacado la reducción de empleos afectados por este ERE en el planteamiento inicial de la empresa, aunque ha señalado que la "labor" de los sindicatos ahora es rebajar aún más ese número "buscando alternativas", incluso medidas voluntarias.
Asimismo, ha señalado que, aunque el plazo para llegar a un acuerdo ambas partes finaliza el 26 de octubre, "el tiempo no debería ser un problema para llegar a un acuerdo" y, por parte de UGT, se ha pedido formalmente que, si fuera necesario, se amplíe ese plazo de negociación.