Santiago acogió este sábado la reunión informal de ministros de Economía y Finanzas (Ecofin) de la Unión Europea, que contó con la presencia de ministros de sesenta países, tanto de la UE como, por primera vez, de América Latina y los países del Caribe.
España ocupa este semestre la presidencia de turno de la UE y, bajo ese papel, la vicepresidenta primera en funciones, Nadia Calviño, buscó acercar posiciones sobre algunos de los temas más relevantes antes de fin de año, como la reforma de las reglas fiscales o la gobernanza para desplegar inversiones en América Latina y el Caribe.
Con motivo de esta cita “histórica”, según Calviño, unas 1.600 personas coincidieron en Santiago para seguir las reuniones y citas celebradas esta semana por el Ecofin. Pasaron por la ciudad unas 100 delegaciones de diferentes países, gobernadores de ambas partes del mundo y también representantes de bancos multilaterales y de las principales instituciones financieras internacionales.
Uno de los principales puntos que se abordó fue la reforma de las reglas fiscales europeas. Calviño destacó el “fuerte compromiso” de todos los socios europeos para buscar un consenso al respecto.
La responsable económica del Gobierno en funciones considera que la reunión de ayer fue “muy fructífera” y permite que en las próximas semanas se empiece a avanzar en los diferentes niveles para poder llegar a poner un posible acuerdo sobre la mesa en el Ecofin de octubre.
Con la vista en esa reunión, Calviño aseguró que hay “unanimidad” por parte de los 27 respecto a la necesidad de intensificar trabajos en las próximas semanas para lograr un consenso. “Se han mostrado todos ellos abiertos a pasar a la fase de la negociación política”, apuntó.
El comisario europeo de Comercio, Valdis Dombrovskis, destacó la “ambición” de la presidencia española para tener antes de que acabe el año un acuerdo en torno a las reglas fiscales. “Puede que sea un gran desafío, pero la presidencia española está muy comprometida”, dijo el comisario, tras asegurar que desde la Comisión van a continuar apoyando a la presidencia española en sus esfuerzos.
Saludando “la ambición” de la presidencia española para llegar a un acuerdo antes de que termine el año, se mostró partidario de ver de qué manera “se puede avanzar” en lo que los líderes europeos ya denominan “la vía de Santiago o camino fiscal”.
Precisamente Calviño con anterioridad valoró como “elemento muy positivo” el Camino de Santiago y destacó que sirvió para generar “muchas metáforas” a los participantes en el Ecofin. “Estoy segura de que todos van a volver. Tú vas a volver?”, le preguntó, a lo que Dombrovskis respondió que sí.
Por su parte, el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, reconoció que se han producido “avances” positivos en la revisión de las reglas fiscales pero pidió ayer a los Estados miembro –que se comprometieron a cerrar un acuerdo antes de que acabe el año– que “no cambien el equilibrio” de la propuesta presentada por Bruselas para garantizar una senda de deuda descendente pero sin comprometer las inversiones.