José Manuel Miñones (Santiago, 1972) afronta una campaña cercada por los sucesivos acuerdos entre PP y Vox en toda España, los cuales califica de “pactos de la vergüenza” y alerta del “peligro” que suponen en cuanto a recorte de derechos fundamentales.
¿Cómo está siendo esta carrera hacia el 23-J? Decía usted hace unos días que en esta campaña había que explicar todo lo que no pudieron explicar antes del 28-M.
Con mucha marcha... Es una campaña distinta, en la que tenemos que contagiar y explicar mucho... Creo que a la ciudadanía le ha llegado el mensaje de que tenemos que llegar al 23-J con las cosas claras para votar por todo lo que nos jugamos, y se muestra animada, interesada.
¿Qué se explicó mal el 28-M?
No es que se explicara mal, sino que la toda campaña se centró en no contar, en no explicar... Tanto el PP como Vox centraron el debate en otras cuestiones, hablando de política nacional cuando eran unas municipales y unas autonómicas... Como ministro de Sanidad echo en falta el debate sobre sanidad, me sorprende que no se hable de salud, cuando es lo que más nos interesa a todos. Es necesario hablar de sanidad, de derechos sociales... Porque están riesgo por esos pactos de la vergüenza entre el PP y Vox.
Vox colgó una pancarta en la que se tiraban a la basura muchos de esos derechos... Ahora está ahora mismo en gobiernos de toda España.
Son otros los que han abierto las puertas a Vox a gobernar ayuntamientos y comunidades y lo que va a hacer el PSOE es impedir que entre también en el Gobierno de España. Es cierto que antes del 28-M solo teníamos un modelo de lo que era un gobierno de PP y Vox, el de Castilla y León, pero ya veíamos por dónde iban. Era algo muy a tener en cuenta antes, pero sobre todo ahora en que los ataques ya son frontales a la cultura, a los derechos a las mujeres... Por eso es importante que vayamos a votar sobre todo con mucha cabeza. La gente tiene que saber lo que puede llegar a ocurrir y no creer las mentiras que traslada cada día Feijóo.
¿Cree que Vox sacará representación por Galicia?
Estoy convencido de que no si la gente vota con corazón y cabeza, pero corremos el riesgo de que entren a través del PP. Los dos hablan de ‘sanchismo’, sanchismo es subir las pensiones, son todas las inversiones que se han hecho en A Coruña, el dragado de la ría de O Burgo... También es sanchismo eso con lo que ahora se ha ofrecido a pactar, se ha dado cuenta de que no era tan malo.
¿Qué le pareció el debate?
No soy de los que piensa que un debate se gana o se pierde porque creo que los debates están precisamente para explicar los programas, la forma de entender la política, mostrar a la gente tus ideas, aquello que quieres llevar a cabo para transformar su vida... Y es cierto que el formato no ayudó. Cuando tienes enfrente a una persona que está mintiendo, la reacción es tratar de demostrar que es mentira, lo que te deja poco tiempo para explicar lo que de verdad importa, que es el programa. Pero claro, el que tenemos del PP es la nada. Conocemos unas ideas muy demagógicas, pero no propuestas realistas. Lo que sí sabemos del PP es lo que hace y lo que ha hecho hasta el momento es votar en contra de todos los avances sociales: la subida de las pensiones, el Ingreso Mínimo Vital, el SMI... En contra de todos y cada uno de los derechos que hemos conseguido. Ahora se dicen otras cosas, pero con un interés claramente electoralista que recuerda mucho a esas políticas en Brasil o EEUU, a esa ultraderecha de mensajes a golpe de titular.
¿Cree que dos campañas tan seguidas darán resultado?
Lo que está claro es que los españoles tienen que decidir y más a raíz del 28-M. Creo que es una acierto reaccionar tan rápido y que los españoles decidan lo que quieren para los próximos cuatro años. A la vista de los pactos de la vergüenza que hemos visto estas semanas, en todos los ayuntamientos y comunidades en los que PP y Vox se han unido a pesar de no ser la fuerza más votada, es más necesario que nunca que España elija qué camino quiere seguir. El nuestro lo tenemos muy claro, con un balance muy positivo en cada uno de los territorios, y la muestra la tenemos aquí, en Galicia, y en A Coruña. Esta es la ciudad en la que el Gobierno de España más ha invertido con Pedro Sánchez como presidente.
¿Cuál será el papel de Galicia en estas Generales? ¿Tendrán impacto los resultados de las municipales?
Espero que el 23 de julio los gallegos elijan en función de lo que les importa: su bolsillo, su familia, su situación personal... Con ese sentimiento, tengo claro que el 23 de julio ganará el PSOE. El Gobierno de Sánchez ha sido el más gallego de todos, y puedo decir que el presidente es coruñesista mil por mil. En cualquier campo, sea cual sea la cuestión, el Gobierno de España ha respondido como nunca. En Galicia se han desbloqueado proyectos que llevaban años parados, en la ciudad más grande o en el municipio más pequeño.
¿Cuáles quedarían pendientes?
Siempre quedan cuestiones pendientes y más en una legislatura marcada por una pandemia, que lo paralizó todo; una guerra a las puertas de Europa, que afecta directamente a los precios del mercado... A pesar de todo, este Gobierno ha dado respuesta a las necesidades de la ciudadanía.