Los efectivos del Servizo Local de Emerxencias de O Grove no daban crédito a lo sucedido en plena noche de San Juan. Mientras se encontraban sofocando las llamas en un lateral de una hoguera en Porto Meloxo, un sujeto se introdujo en el camión motobomba y se hizo con las llaves de contacto y con un casco equipado con una linterna para atmósferas explosivas.
Los efectivos se encontraban a unos 15 metros del vehículo y, al quedarse sin agua, se acercaron al mismo. Su sorpresa fue mayúscula al comprobar que la puerta del copiloto estaba abierta y faltaban el casco y las llaves, lo que provocó que el camión quedase inutilizado durante al menos media hora, el tiempo necesario para acercarse a la base y coger las llaves de repuesto.
La situación empeoró cuando poco después se dio el aviso de que un contenedor estaba ardiendo en la calle Luís Seoane. En ese momento, al no poder atender la incidencia, avisaron al servicio de Sanxenxo, pero finalmente no tuvo que intervenir porque los vecinos apagaron el fuego con un extintor y una manguera.
El jefe de servicio de O Grove, José Antonio Alvárez, explica que “afortunadamente non ocorreu outra cousa peor, como un incendio nunha casa ou que o lume do contenedor se estendera a outros elementos”. Alvárez destaca que el hurto, lejos de poder considerarse como una broma, es un acto de “pura maldade. É como se rouban as chaves dunha ambulancia que está atendendo a un ferido nun accidente”.
Emerxencias ha hecho un llamamiento a la colaboración ciudadana para recuperar los elementos sustraídos. El sospechoso sería un joven de entre 17 y 22 años, con el pelo oscuro y de 1,70 metros de altura.
Aunque un casco amarillo de esas dimensiones es "difícil de esconder", la Policía Local no ha encontrado más pistas sobre los hechos hasta el momento.