Resulta complicado encontrar un lugar en el mundo donde no haya llegado un gallego. Incluso la luna, según dice la tradición musical de los noventa, fue colonizada por los hijos de Breogán. Sin embargo, la Xunta de Galicia se ha propuesto llegar a cada rincón del planeta y facilitar el retorno de quienes en su día tuvieron que hacer las maletas en busca de una oportunidad. La propuesta de la Administración es precisamente añadir al atractivo de la vuelta a casa una especie de colchón u oportunidad directamente proporcional a la que motivó su salida, y que evite cualquier tipo de riesgo o duda.

Hasta el próximo día 30 de septiembre permanecen abiertas las ayudas denominadas Retorno Emprendedor, destinadas a que los gallegos del exterior pongan en marcha un proyecto empresarial en su propia tierra. El beneficiario podrá fijar de nuevo su residencia e integrarse de nuevo laboral y socialmente, al mismo tiempo que realiza sus tareas. El cómo se llama 10.000 euros destinados a sufragar gastos derivados de la implantación del nuevo negocio: 6.000 de aportación directa, 1.000 en el caso de tratarse de una mujer y 3.000 más en caso de establecerse en un ayuntamiento del rural. Esta última se convirtió, desde el pasado año, en la alternativa preferida por el 60 por ciento de los beneficiarios.

Una Galicia más competitiva

Se trata de una iniciativa puesta en marcha por la Secretaría Xeral da Emigración que si algo tiene detrás es el testimonio de miles de personas que convirtieron el término morriña o saudade en felicidad y salud, tanto a nivel personal como económico. La Estrategia Retorna tiene como credo y bases de su plan de actuación el derecho de los gallegos a retornar, el impulso a la demografía y la mejora de la competitividad económica. Reclutar talento de vuelta es, en la práctica, una inversión de futuro.

Con un presupuesto de aproximadamente un millón de euros en la actualidad, el término retorno podría utilizarse no solamente para la vuelta de los potenciales emprendedores, sino como definición del balance económico que arroja sobre el tejido empresarial gallego. Las ayudas permitieron destinar 4 millones de euros para lograr unos 600 proyectos empresariales en Galicia, con un impacto de inversión por encima de los 32 millones de euros. Las matemáticas hablan de una recuperación de ocho veces la apuesta inicial y una continuidad de futuro para la actividad económica.

Miles de historias

Más allá de valoraciones macroeconómicas, se trata también de un plan de ayuda a las personas. Podría llenarse un estadio de Primera División con todas y cada una de las historias de reencuentro con la tierra que crecieron gracias a la ayuda de la Xunta de Galicia. Un total de 25.000 gallegos sintieron lo que es estar de nuevo en casa y con un proyecto empresarial por delante.

Los interesados que deseen solicitar información sobre el retorno podrán hacerlo en las Oficinas Integrais de Asesoramento e Seguimento ao Retorno situadas en las principales ciudades gallegas, financiadas a través del Fondo Social Europeo. Lo que no tiene vuelta atrás es una fecha límite para hacerlo: El próximo 30 de septiembre acaba el plazo para iniciar el camino de vuelta.