El Oktoberfest es una de las fiestas más populares de Alemania y una de las más conocidas en el mundo entero.
La celebración, que nació para conmemorar el aniversario del matrimonio entre el príncipe Luis I de Baviera y Teresa de Sajonia y Hildburghausen, no dejó de festejarse desde su creación en el año 1810, excepto en períodos de guerra o en situaciones excepcionales.
Durante el multitudinario evento, se puede disfrutar de cerveza, comida y de innumerables atracciones y espectáculos musicales que contribuyen a contagiar el ambiente festivo a todos los asistentes.
No todos somos tan afortunados como para poder asistir en persona a esta fiesta que tiene lugar en la ciudad alemana de Munich, pero no se apenen, existe la oportunidad de vivir un anticipo de esta popular celebración, en versión española, sin moverse de A Coruña.
Se trata del OktoberFest Olé que permite disfrutar del mejor ambiente en un evento que recrea la famosa fiesta alemana. En él no falta la música en directo y la gastronomía bávara más típica.
El escenario en el que tendrá lugar esta celebración no podía ser otro que Palexco, ubicado en pleno corazón de la ciudad herculina, al lado de la Marina coruñesa y a un paso del centro. Desde el 5 al 15 de agosto acoge esta fiesta lúdica y culinaria, en la que se dan cita los amantes de la cerveza y de la cocina alemana.
Desde GastroIdeal te contamos las principales especialidades bávaras con las que podrás acompañar tu cerveza si decides acudir al Oktoberfest Olé.
Si hay un país famoso por sus salchichas, es Alemania. En Palexco podrás probar distintas especialidades artesanas de este producto: Bratwurst, Bockwurst, Picante, Weisswurst o Nuremberg son las alternativas que se ofrecen, aunque, si lo prefieres, puedes optar por una degustación de todas ellas. Se elaboran según las típicas recetas alemanas: a la brasa, hervidas, con mostaza, ketchup o puré de patata y chucrut.
Los pretzels, también conocidos como bretzels, son otros de los protagonistas de la mítica fiesta bávara, junto a las salchichas y la cerveza. Se trata de un tipo de bollo horneado, con forma de lazo, adornado con gruesos granos de sal, que le dan ese sabor tan característico.
El codillo de cerdo asado se sirve con una corteza crujiente que le da un toque delicioso. Este plato tradicional alemán se acompaña de puré de patata y chucrut, una col blanca fermentada de sabor ligeramente amargo.
En un evento de este tipo tampoco podían faltar las famosas ensaladas bávaras como la ensalada de arenque, de puerros, de patata o embutidos.
Si todavía, no te has decantado por uno de los platos anteriores, en el Oktoberfest Olé también podrás probar unas deliciosas costillas a la brasa, alitas picantes con patatas chips o las clásicas hamburguesas alemanas 100% vacuno.
Si prefieres prescindir de la carne, puedes optar por queso emmental, brie o de cabra o tomarte un montadito de salmón, boquerón o anchoas.
En el Oktoberfest Olé tampoco faltan los auténticos postres alemanes, entre los que no puede faltar el sabroso Apfelstrudel o strudel de manzana, que consiste en una fina masa de hojaldre enrollada, rellena de manzana, pasas, canela y azúcar.
Pero si lo prefieres, también podrás probar la tarta Sacher, la tarta San Marcos o una exquisita tarta de frutas.
Por supuesto, escojas lo que escojas, existe una gran variedad de cervezas para acompañar la comida, a elegir entre la de trigo, la tostada, la negra o la rubia. Todas ellas servidas en jarras de medio litro y un litro, al más puro estilo bávaro.