Los disturbios que vienen sacudiendo Francia desde el 27 de junio siguen dando muestras de remitir con claridad, con solo 16 detenidos en la noche del martes al miércoles, según un primer balance del Ministerio del Interior, una cifra muy inferior a los 72 de la víspera, los 157 de la noche precedente o los casi 1.000 que hubo por noche en los primeros días. El departamento de Interior informó también de 78 vehículos quemados y 116 incendios en la calle provocados por los altercados, que se desencadenaron con la muerte la semana pasada de un menor de 17 años por un tiro policial cuando trataba de escapar de un control al volante de un coche, sin carné.

Desde entonces ha habido 3.625 detenciones por participar en los disturbios, de las que 1.124 corresponden a menores. Entre los detenidos, ya fueron presentados ante un magistrado 990 y 380 ingresaron en prisión tras ser juzgados por el procedimiento de comparecencia inmediata. En cuanto a los daños materiales, junto a los varios cientos de edificios públicos quemados o deteriorados y a los miles de coches incendiados, el ministro de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, recordó que también fueron desvalijados o destruidos más de 1.000 comercios, varios cientos de bares y 400 sucursales bancarias. “Todo eso para nada, destruir por destruir”, dijo Le Maire, que insistió en que esa violencia “es incalificable e injustificable”.

Explicó también que en el Consejo de Ministros de ayer se examinaron medidas para “reconstruir rápido”. Eso va en la línea con el anuncio del presidente francés, Emmanuel Macron, de trabajar en una ley con carácter urgente para la reconstrucción. Le Maire indicó que para las personas cuyo seguro del coche no cubre el incendio en disturbios (del 10 al 15%, según sus cálculos) y que se quedaron sin vehículo, se va a activar el Fondo de Garantía de Víctimas, del que se podrán beneficiar personas con ingresos anuales inferiores a 26.000 euros.

La UE responsabiliza al país

La vicepresidenta comunitaria Vera Jourova dijo en relación a los disturbios que corresponde al país adoptar las medidas “necesarias y proporcionadas” para mantener la seguridad y la paz social. “Es competencia de cada Estado miembro analizar cuáles son las amenazas que se plantean para la seguridad nacional y después adoptar las medidas convenientes”, explicó.

Jourova y el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, fueron preguntados sobre los disturbios. El comisario Reynders señaló que el mantenimiento del orden público no es algo que se analice en el informe sobre el Estado de Derecho, lo que “no quita para que podamos reconsiderar la situación”. El comisario añadió, por otra parte, que “se puede ejercer libremente el derecho de manifestarse, pero asaltar comercios o destruir propiedades públicas en las ciudades de un país no tiene nada que ver con el libre ejercicio al derecho a la manifestación”.