La negociación que el Ayuntamiento de Oleiros mantendrá con Demarcación de Costas con respecto a la reparación del paseo de la ría de O Burgo, en el tramo de Beiramar y Agramar, se antoja complicada. Al menos por parte oleirense porque quiere una infraestructura si no nueva, casi.

“Non me vale que tapen os buratos meténdolle pedras”, dijo ayer al alcalde, Ángel García Seoane, tras anunciar que ya se había puesto en contacto con este departamento del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico para reclamarle que repare la senda que, según él, han dañado las dragas encargadas de la limpieza de la ría.

Cabe recordar que el pasado viernes, día 9, fue el propio regidor el que denunciaba que la empresa provocó “graves estragos no paseo entre Agramar e Beiramar”  Los daños, añadía, se produjeron debido a la colocación de amarres para las dragas en los muros de la senda peatonal. En total fueron siete los puntos que originaron los desperfectos.

"Varios muros quedaron desfeitos e ata chegaron a empregar unha árbore para amarrarse, danando a propia árbore e abrindo o muro que a suxeitaba", indicaba García Seoane.

El regidor se muestra bastante contrariado por esta cuestión ya que el Gobierno se está negando a concluir el paseo como le solicitó en reiteradas ocasiones y ahora lo responsabiliza de destrozar las zonas que sí se encuentran construidas.