El Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia suministrará durante las próximas semanas agua potable trasportada en barco a las poblaciones de Bermeo, Mundaka, Sukarrieta y Busturia, una medida inédita para esta entidad con la que espera llevar 2.300 metros cúbicos de agua al día a esta comarca vizcaína afectada por la sequía.
El buque cisterna, con una capacidad para 4.000 metros cúbicos en cada viaje, realizará los trayectos entre el puerto de Bilbao (Santurtzi) y Bermeo.
Antes de transportar la primera carga, estos días se están realizando maniobras de ajuste técnico y control, consistentes en asegurar que la tubería de llenado en el puerto de Bilbao se acopla perfectamente al depósito del barco, así como con el de salida en el puerto de Bermeo, y que se conecta también a la red de bombeo construida expresamente para esta función, ha informado este lunes el Consorcio.
El transporte de agua en barco a los sistemas de suministro de Busturia y Bermeo, que proveen a las poblaciones de Bermeo, Mundaka, Sukarrieta y Busturia, reducirá las necesidades de abastecimiento actuales en esta zona procedentes desde el sistema de Gernika, por lo que éste último también se verá beneficiado por la actuación, según el Consorcio.
Esta medida "excepcional y coyuntural, sin precedentes en el ámbito de gestión del Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia", viene a reforzar otras adoptadas en semanas anteriores, ya que la situación de los cauces de los que se abastece la comarca, en la que viven unas 45.000 personas, "ha empeorado en los últimos días al no haber llovido suficientemente como para revertir la situación actual de emergencia, unido también a la acumulación de jornadas de altas temperaturas".
El Consorcio ha destacado que las circunstancias "exigen medidas en la misma proporción", por lo que, además de continuar con las limitaciones vigentes desde el 19 de julio en la comarca, se van a "disminuir sensiblemente las presiones del servicio durante la noche –de 00:00 a 06:00 horas–, para incrementar los ahorros de agua en el suministro".
Ha precisado que el "déficit de agua histórico" de la comarca, que el Plan de Acción Territorial para la Reserva del Urdaibai (PAT) cifró en 100 litros por segundo, ha obligado a poner en marcha en los últimos meses un "complejo programa de gestión de la oferta para activar nuevas captaciones y blindar todo el recurso disponible".
Desde mediados de julio la situación pasó ya a la fase de alerta, por lo que en todos los municipios de la comarca vizcaína de Busturialdea se establecieron restricciones como la clausura de las fuentes municipales que no sean de botón, la prohibición de regar parques y huertas, reducir a lo imprescindible el baldeo de calles o la prohibición de llenar o reponer las piscinas privadas y el lavado de vehículos, superficies o plazoletas privadas.