14º-16º
jueves | 20 febrero | 2025
Juana Rivas recurrirá la decisión de la justicia italiana, que ha vuelto a otorgar la custodia de su hijo menor al padre, Francesco Arcuri, una decisión que, según sus abogados, no afecta a la medida cautelar de protección dictada en el ámbito penal por la jurisdicción española, que acordó que no regresara con su progenitor.
En un comunicado, Carlos Aránguez, letrado de Rivas, argumenta los motivos por los que recurrirán el fallo de la Corte de Apelación de Cagliari, en que Arcuri está procesado en Italia por presunto maltrato a su hijo, de 11 años, por lo que considera “inaudito” que una víctima, “máxime siendo un menor”, deba convivir con el supuesto agresor.
Argumenta también el recurso en que, con esta decisión enmarcada en el proceso civil de familia sobre la custodia del menor que se ha dirimido en Italia, se separa a Daniel de su hermano mayor, Gabriel, “que tras alcanzar los 16 años y denunciar a su padre por maltratarle decidió trasladarse a España para vivir con su madre”.
Esta nueva decisión, agrega, infringe la sentencia dictada por la Corte de Casación italiana, que “anuló radicalmente la anterior sentencia de instancia que también concedía la custodia a Arcuri”.
Según Aránguez, la Corte de Casación italiana ordena tener en consideración que los hermanos han de vivir juntos y que ha de prevalecer el interés superior del menor por encima de cualquier otro. Y “lógicamente, el interés superior de Daniel no es compatible con convivir con un padre procesado por maltratarle”, añade.
El equipo jurídico de Rivas recuerda que el tribunal encargado de este procedimiento es la Sala de lo Mercantil de la Corte de Apelación de Cagliari, “sin especialización en la materia”.
Esto es así, explica, porque la anterior decisión de la Sala de lo Civil de ese mismo tribunal fue revocada por la Corte Suprema italiana, y no habiendo otra sala de lo civil, pasó a la especializada en Derecho Mercantil.
Aránguez incide en que se trata de un menor de 11 años que “ha expresado ante un Juzgado español que siente terror a volver a vivir con su padre”.
Tras señalar que Daniel se queda de momento en España y que seguirán ejerciendo todas las acciones que garanticen su derecho a “una vida libre de violencia”, asegura que Rivas cumplirá “cualquier instrucción de la jurisdicción española sobre el menor, que es la que debe decidir sobre su protección, pues Daniel y Juana se encuentran en España”.
También ha reaccionado al nuevo pronunciamiento sobre al custodia del menor su padre, Francesco Arcuri, que a través de su letrado en España, Enrique Zambrano, ha explicado a EFE que lo único que espera de esta sentencia es “no tener que intervenir” y que el menor “vuelva a donde pertenece”.
Arcuri presentó el pasado mes de enero en Italia una denuncia contra Juana Rivas, a la que acusó de un delito de sustracción de menores por frenar la vuelta del hijo menor de ambos a su país de residencia, el mismo delito por el que esta vecina de Maracena ya fue juzgada, condenada y parcialmente indultada.
La denuncia fue presentado en Italia, por lo que cualquier consecuencia legal se produciría en aquel país
