En 2021 doce provincias españolas no notificaron ninguna interrupción voluntaria del embarazo, las mismas que oficialmente llevan sin practicar ni un solo aborto desde hace seis años, según el último informe del Ministerio de Sanidad.
Estas son Jaén (Andalucía), Huesca, Teruel y Cuenca (Aragón), Toledo y Guadalajara (Castilla-La Mancha), Palencia, Ávila, Segovia, Soria y Zamora (Castilla y León) y Cáceres (Extremadura), además de en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.
Sin embargo, los datos de Sanidad demuestran que las mujeres residentes en estas regiones sí se sometieron durante 2021 a interrupciones voluntarias del embarazo, lo que significa que, para hacerlo, tuvieron que desplazarse a otras provincias o comunidades autónomas.
Esta es una práctica con la que la reforma de la Ley del Aborto que se encuentra pendiente de aprobación en el Senado quiere acabar, como se expone en el preámbulo de la norma, donde el Gobierno ha dejado claro que su objetivo es "garantizar las interrupciones voluntarias del embarazo en la sanidad pública evitando la desigualdad territorial".
Desplazamientos forzosos
Casi el 5% de las mujeres que se sometieron a una interrupción voluntaria del embarazo en España en 2021 residían en provincias que ese mismo año no notificaron ni un solo aborto.
El caso más paradigmático es el de Castilla-La Mancha, donde el 58% de las residentes a las que se practicó un aborto no recibió dicha atención médica en su provincia de residencia. De hecho, pese a que Toledo fue la provincia catellanomanchega donde más residentes abortaron, esa región no practicó en 2021 interrupciones voluntarias del embarazo.
Por su parte, en Aragón, Castilla y León y Extremadura dicho porcentaje oscila entre el 22 y el 32%.
En clínicas privadas
El 84% de los 90.189 abortos practicados en España en 2021 se realizaron en centros hospitalarios o clínicas privadas, pese a que el 71% de las informaciones se solicitaron en centros públicos.
Cataluña, Baleares y Cantabria son las comunidades donde más abortos asume la sanidad pública (52,5%, 61,8% y 67,3%, respectivamente). En el punto contrario están Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia, donde el porcentaje de abortos en la pública está entre el 0 y el 0,5%.
El número total de interrupciones voluntarias del embarazo se ha estabilizado este año después de la bajada que supuso la pandemia. Así, en 2021 se han realizado 1.920 abortos más que en el año anterior, aunque el número de mujeres que abortaron en España es el más bajo de los últimos diez años, exceptuando 2020.
Los datos de Sanidad muestran que el 91% de los abortos en 2021 se realizaron "a petición de la mujer", es decir, porque no se deseaba tener un hijo y no por razones médicas, que motivaron el 9% de las interrupciones restantes.
El 72% de los embarazos interrumpidos no habían superado las ocho semanas de gestación y solo el 0,1% superaban las 22 semanas, límite tras el cual solo se aceptan abortos por razones médicas y con el visto bueno de un comité médico.