El papa descansa y pasa una noche tranquila en su tercera semana ingresado

El papa continúa descansando sin sufrir nuevas crisis respiratorias, según informa la Santa Sede en su conciso comunicado matinal
El papa descansa y pasa una noche tranquila en su tercera semana ingresado
Altar deseando la recuperación del Papa en Roma | EFE/EPA/GIUSEPPE LAMI

El papa Francisco ha pasado una noche "tranquila", según informó el Vaticano este jueves, cuando se cumple su tercera semana ingresado en el hospital Gemelli de Roma por sus problemas respiratorios.
"La noche ha transcurrido tranquila, el papa aún sigue descansando", indicó la oficina de prensa de la Santa Sede en su ya habitual y escueto comunicado matinal, a la espera del parte médico más detallado que se divulgará en torno a las 19.00 horas (18.00 GMT).


Hasta el momento se conoce que Francisco se mantiene "estable", no ha sufrido nuevas crisis respiratorias como las del pasado viernes y ha empezado la fisioterapia motora, aunque "en consideración a la complejidad de su cuadro crítico, el pronóstico permanece reservado".


El pontífice, de 88 años, se encuentra ingresado desde el pasado 14 de febrero a causa de una neumonía bilateral y otros graves problemas respiratorios. Su neumonía continúa con su "evolución normal" pero los médicos insisten en que esta estabilidad debe entenderse dentro de "la complejidad" de su caso, subrayaron anoche fuentes vaticanas.


El papa Francisco prosiguió este miércoles con su terapia de oxígeno a altos flujos y durante la noche estaba programado que reanudara la ventilación mecánica no invasiva, administrada con una máscara.
Además, ha incrementado la fisioterapia respiratoria que venía realizando desde los últimos días y ha empezado con la motora.


Desde el pasado viernes, las crisis no han vuelto a repetirse y Francisco descansó el miércoles en el apartamento privado que los pontífices tienen en la décima planta del Gemelli, y participó en el rito del Miércoles de Ceniza.
Después se dedicó a algunas tareas laborales, algo que había interrumpido con las últimas crisis de los días anteriores, e incluso volvió a telefonear al párroco de la Franja de Gaza, Gabriel Romanelli, para interesarse como siempre por su situación.

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